i INDICE Página Introducción iv Notas x Capítulo I. Anzia Yezierska ...

entusiasmo que caracterizaba los deseos de las heroínas de recibir una educación
americana en sus primeras historias cortas publicadas en Hungry Hearts (1920),
distanciamiento que era fruto de su propia experiencia en el instituto y en Columbia
University.
Fue en 1900 cuando Yezierska decidió abandonar Hester Street para comenzar
su andadura educativa. En primer lugar, nuestra escritora estudió Ciencias
Domésticas en Columbia University, con una beca de cuatro años. Esta ayuda
procedía de un grupo de señoras que patrocinaban un settlement en el East Side.
Como el lector puede imaginar, Yezierska, absorta en los grandes clásicos de la
literatura europea, no tenía el más mínimo interés por memorizar recetas culinarias.
Tras esta experiencia, la autora que, como su heroína Salomé, era capaz de recurrir
a artes poco convencionales con el objeto de conseguir sus propósitos falsificó un
título de educación secundaria que le permitiría estudiar en la Escuela de
Magisterio. 2
El gusto por la Filosofía y la Poesía, imbuído por la lectura junto a su padre de
los textos bíblicos en su niñez, condujo a Yezierska a rechazar otras asignaturas del
plan de estudios. En 1918 Yezierska había comenzado un seminario en Columbia
con el profesor John Dewey, que era un ferviente admirador de los cuentos de la
joven creadora y la animaba a escribir. Dewey propuso a su alumna formar parte de
un grupo de investigación con otros estudiantes que trabajaban en un proyecto
sobre los judíos polacos inmigrantes en Filadelfia. Yezierska, que aceptó la idea
entusiasmada, asistía al mismo tiempo a un curso de escritura creativa impartido por
Dorothy Scarborough en la misma Universidad. Producto de estos primeros años de
aprendizaje e ilusión fueron su primer relato, "The Free Vacation House", publicado
por la revista Forum en 1915, y "The Fat of the Land", que ganó el premio J.
O´Brien a la mejor historia corta, cuatro años después.
Mary V. Dearborn estudia, en su libro Love in the Promised Land, la influencia
que la relación entre la escritora Anzia Yezierska y el intelectual John Dewey tendría
sobre las ideas y actitudes de ambos. Dewey, que pertenecía al movimiento de
reforma social progresista, enfatizaba la importancia de otorgar un carácter dinámico
y estimulante a la educación. Esto implicaba dos grandes innovaciones: la primera,
usar una metodología basada en la interacción del estudiante con su entorno social
y, la segunda, convertir al profesor en mero transmisor de aquellas herramientas de
aprendizaje que el alumno necesitaba para adquirir sus propios conocimientos. Fue
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