if08-09 - Asamblea Legislativa

154 Defensoría de los Habitantes
Informe Anual de Labores 2008-2009
de las deficiencias administrativas que conducen al
retardo en la remisión de respuestas a las consultas o
solicitudes que recibe.
Hasta el momento, el espacio de reuniones quincenales
se ha traducido en una notable mejoría en
los plazos de respuesta a las consultas formuladas
por la Defensoría, lo que permite preveer que este
proceso de acercamiento interinstitucional provocará
también una atención más ágil y oportuna a las demandas/solicitudes/consultas
realizadas por parte de
la ciudadanía.
b.- Acceso al servicio de agua potable (ICAA y
ASADAS).-
La comunidad de Aranjuez de Pitahaya de Puntarenas
es un asentamiento agrícola desarrollado por el
Instituto de Desarrollo Agrario (IDA), en una zona ubicada
aproximadamente a 30 Kms del cantón central
de Puntarenas.
Esta comunidad está conformada por aproximadamente
100 parceleros bajo la modalidad de asentamiento
humano, granjas agrícolas y parcelas de producción
agrícola. No obstante, desde el inicio del proyecto,
el servicio de agua potable para las parcelas y parte
de las granjas se ha brindado de manera irregular
y deficiente por parte del Instituto Costarricense de
Acueductos y Alcantarillados (AYA).
Un caso que ilustra esta problemática, se registró a
inicios del año 2008 mediante la SI 16345-2008, en la
cual una habitante recurre a la Sede Regional en busca
de acompañamiento institucional, con el objetivo de
gestionar ante el AyA la habilitación del servicio en las
Parcelas de Producción. Sobre el particular, señaló la
habitante en su denuncia:
“Vive en el Asentamiento Las Huacas de
Aranjuez de Pitahaya de Puntarenas, donde
desde hace tres años el AyA ha prestado el
servicio del agua de forma gratuita, pero con
serias deficiencias de suministro y calidad
(...)
El 1º de febrero de 2007 la comunidad se
dirigió por escrito a la Oficina del AyA en
Puntarenas planteando formalmente su
inconformidad, siendo que en lugar de una
respuesta formal, a partir del día 14 de
marzo de 2007, se presentaron cuadrillas
de trabajadores de la institución, que están
destruyendo las cajas que ellos mismos habían
instalado para colocar los hidrómetros, e
iniciaron la suspensión de los servicios a las
veinte familias del asentamiento, en el cual,
no existe hasta la fecha una fuente pública
disponible (…)”.
Respecto a dichas denuncias, que se recogen también
en otras solicitudes de intervención, la Sede Regional
Pacífico Central ha requerido los respectivos informes
y acciones correctivas mediante múltiples gestiones
formales y diversas reuniones con los órganos
locales del AyA. Al respecto, se ha logrado que ese
Instituto emprenda algunas labores para rescatar y
poner en operación el pozo de abastecimiento local.
Actualmente, la comunidad cuenta con un servicio de
aceptable calidad, pero también se están realizando
gestiones para la habilitación de un nuevo pozo que
abastezca las parcelas.
La recurrencia de quejas contra el AyA, así como el
grado de vulneración de derechos que generan las
respectivas omisiones institucionales, ha motivado
que la Sede Regional proponga y participe ya en un
proceso de acercamiento interinstitucional con dicha
entidad, mediante reuniones periódicas que hasta el
momento han coadyuvado en la disposición de las
siguientes acciones:
• Aprobación y giro de recursos por parte del
AyA con el fin de que el ICE construya el tendido
eléctrico necesario para la operación del
pozo y sus bombas de impulsión en la comunidad
de Aranjuez de Pitahaya de Puntarenas
• Diseño del tanque de captación en dicha
comunidad
• Elaboración de estudios técnicos para identificar
necesidades de tuberías, de líneas de
impulsión y de capacidad de aguas para el
abastecimiento de al menos 300 familias en
la zona
La experiencia de la Sede Regional en esta temática
demuestra que, si bien subsisten muchas deficiencias
para la prestación de un servicio público de calidad,
también existe una voluntad por parte de los órganos
regionales y locales del AyA para revisar su trabajo y
adoptar medidas correctivas en beneficio de las y los
habitantes.
Así también, esta experiencia demuestra que además
del control firme y permanente que debe seguir realizando
la Defensoría sobre las instituciones públicas,
también la modalidad del acercamiento y discusión
propositiva con esas entidades, arroja un balance positivo
en términos de la labor que corresponde a esta