Jefatura femenina de hogar, pobreza urbana y exclusión - CROP
Jefatura femenina de hogar, pobreza urbana y exclusión - CROP
Jefatura femenina de hogar, pobreza urbana y exclusión - CROP
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
María <strong>de</strong>l Carmen Zabala Argüelles<br />
con frecuencia estas actúan como factores que profundizan y<br />
empeoran las condiciones objetivas <strong>de</strong> vida (Feijoó, 1998: 21).<br />
La incorporación <strong>de</strong> esta dimensión subjetiva también permite la<br />
aproximación a la dimensión sociocultural <strong>de</strong> la <strong>pobreza</strong> en los estudios<br />
que se realizan, enriqueciendo su análisis y proyección. uno <strong>de</strong> los<br />
pioneros en transgredir la visión exclusivamente económica <strong>de</strong>l fenómeno<br />
es Oscar Lewis. Para este <strong>de</strong>stacado exponente <strong>de</strong> la antropología<br />
cultural <strong>urbana</strong>, la <strong>pobreza</strong> no se <strong>de</strong>fine <strong>de</strong> manera exclusiva por la<br />
privación económica, más bien la consi<strong>de</strong>ra como un fenómeno esencialmente<br />
sociocultural. En sus palabras: “un sistema <strong>de</strong> vida, notablemente<br />
estable y persistente, que ha pasado <strong>de</strong> generación a generación<br />
a lo largo <strong>de</strong> líneas familiares” (Lewis, 1965: xiV); es, en resumen,<br />
“el factor dinámico que afecta la participación en la cultura nacional<br />
más amplia creando una subcultura por sí misma” (Lewis, 1959: 17).<br />
Con ello conforma su controvertido concepto <strong>de</strong> cultura <strong>de</strong> la <strong>pobreza</strong>,<br />
señalando como sus características esenciales “la falta <strong>de</strong> efectiva participación<br />
e integración a las instituciones sociales <strong>de</strong> la gran sociedad<br />
[y] la <strong>pobreza</strong> <strong>de</strong> cultura” (Lewis, 1966: 15) 66 .<br />
Esta formulación constituye un aporte sustancial a los estudios <strong>de</strong><br />
<strong>pobreza</strong>, al incorporar la dimensión sociocultural en su análisis, particularmente<br />
las relaciones cultura-individuo, cultura-personalidad, que se<br />
conforman y expresan en la vida real; por tanto, la cultura <strong>de</strong> la <strong>pobreza</strong><br />
se consi<strong>de</strong>ra esencial en la interpretación cultural <strong>de</strong> la <strong>pobreza</strong> y sus<br />
causas. Ello, por supuesto, no implica <strong>de</strong>sconocer aspectos sustanciales<br />
<strong>de</strong> las críticas que este concepto ha recibido por el supuesto énfasis en<br />
las limitaciones <strong>de</strong> los pobres, en <strong>de</strong>trimento <strong>de</strong> la afectación que supone<br />
la ausencia <strong>de</strong> vinculación al sistema económico urbano-industrial y la<br />
consecuente inseguridad crónica <strong>de</strong> empleo y <strong>de</strong> ingresos 67 .<br />
Con esta formulación sobre la cultura <strong>de</strong> la <strong>pobreza</strong> <strong>de</strong> Lewis es<br />
coherente el análisis <strong>de</strong> la <strong>pobreza</strong> como matriz cultural, que la concibe<br />
como cultura productora <strong>de</strong> comportamientos, percepciones, acciones,<br />
estrategias y modos <strong>de</strong> vida pobres, con potencialida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> reproducción<br />
<strong>de</strong> esta condición, aproximación que ha sido realizada a partir <strong>de</strong><br />
la categoría habitus <strong>de</strong> bourdieu (Rodríguez, 2005).<br />
66 Entre los rasgos inherentes a la cultura <strong>de</strong> la <strong>pobreza</strong> y a los individuos que viven en<br />
ella, Lewis señala los siguientes: altas tasas <strong>de</strong> mortalidad, mayor presencia <strong>de</strong> jóvenes,<br />
bajo nivel educativo, baja participación social y política, precariedad económica, <strong>de</strong>sempleo,<br />
trabajo informal, alcoholismo, violencia, iniciación sexual temprana, inestabilidad<br />
<strong>de</strong> las uniones, matrifocalidad, autoritarismo, orientación al presente, sentimientos <strong>de</strong><br />
resignación y fatalismo, machismo, actitud crítica hacia valores e instituciones sociales,<br />
sentido <strong>de</strong> marginalidad, sentimientos <strong>de</strong> inferioridad y ausencia <strong>de</strong> conciencia <strong>de</strong> clase.<br />
67 Para ampliar lo relativo a las críticas a esta teoría, ver Lomnitz (1977) y Valentine (1968).<br />
123