13.07.2013 Views

Documento - GutenScape.com

Documento - GutenScape.com

Documento - GutenScape.com

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

del duque imponía respeto a sus enemigos en las calles. Los<br />

alborotadores del bando Orsini y del bando Colonna cesaban en<br />

sus agresiones a los españoles así que presentían la proximidad<br />

de don Miguelito, el perro feroz de César.<br />

En vano amenazaban a este último con que el rey de España<br />

iba a enviar contra él las tropas que tenía en Nápoles, y Luis XII<br />

haría lo mismo desde el Norte. Tendido en su lecho de dolor,<br />

obligaba a los delegados del Sacro Colegio y a los representantes<br />

de los diversos partidos a venir a tratar con él directamente.<br />

Mientras Micalet Corella y sus hombres se imponían a los<br />

revoltosos, gracias a su disciplina, él, empleando una, diplomacia<br />

genial, estorbaba que los Colonnas se aliasen con los Orsinis,<br />

atrayéndolos finalmente a su causa.<br />

Otros amigos de indiscutible fidelidad quedaban a su lado: el<br />

escritor Agapito de Amalla, su secretario inseparable, y el obispo<br />

de Chiusi, llamado Bonafede, un italiano joven y bravo, con más<br />

de guerrero que de capellán, tan atrevido y feroz <strong>com</strong>o don<br />

Michelotto y dispuesto a dejarse matar por César. Este conseguía<br />

siempre que sus íntimos lo adorasen hasta el sacrificio.<br />

Desde su cama iba dictando un nuevo tratado de alianza con<br />

Luis XII, que firmó el embajador francés. El Sacro Colegio,<br />

obedeciendo sus órdenes, enviaba heraldos por toda Roma para<br />

que pregonasen en nombre del Gobierno pontificio que todo el<br />

que atentara contra el duque de las Romanas o los suyos sería<br />

condenado a la pérdida de la vida y sus propiedades.<br />

El protocolo del conclave exigía que ninguna persona que<br />

llevase armas pudiera permanecer en Roma durante la elección de<br />

un nuevo Pontífice, y cumpliendo dicho mandato, los Orsinis, los<br />

Colonnas y otras facciones habían salido ya de la ciudad el 2 de<br />

septiembre.<br />

César tuvo que hacer lo mismo al frente de su pequeño<br />

ejército, pero con otro aparato que dichos señores italianos,<br />

ostentando el lujo de un gran príncipe seguro de su poder,<br />

sobreponiéndose de un modo heroico a su enfermedad para<br />

mostrarse en público.<br />

309

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!