08.05.2013 Views

PAUL AUSTER - Tres Tribus Cine

PAUL AUSTER - Tres Tribus Cine

PAUL AUSTER - Tres Tribus Cine

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

yo estaba preparado. Mi caso duró meses y, como siempre supe que iba a perderlo, tuve<br />

tiempo de acostumbrarme a la idea de la cárcel. No era uno de esos desgraciados que<br />

están siempre abatidos, contando los días, haciendo una cruz en otro casillero del<br />

calendario cada noche al acostarse. Cuando entré allí, me dije: esto es lo que hay; aquí<br />

es donde vives ahora, tío. Los límites de mi mundo se habían estrechado, pero yo seguía<br />

vivo, y mientras pudiese continuar respirando, tirándome pedos y pensando mis<br />

pensamientos, ¿qué importaba dónde estuviera?<br />

-Es extraño.<br />

-No, nada extraño. Es como el viejo chiste de Henny Youngman. El marido<br />

llega a casa, entra en el cuarto de estar y ve un puro encendido en un cenicero. Le<br />

pregunta a su mujer qué es eso, pero ella finge no saberlo. Aún mosqueado, el marido<br />

empieza a registrar la casa. Cuando entra en el dormitorio, abre el armario y se<br />

encuentra allí a un desconocido. “¿Qué hace usted en mi armario?”, pregunta el marido.<br />

“No lo sé”, tartamudea el otro, temblando y sudando. “Todo el mundo tiene que estar en<br />

alguna parte.”<br />

-De acuerdo, te entiendo. Pero de todas formas debía haber algunos tipos muy<br />

duros contigo en aquel armario. No debió resultar muy agradable.<br />

-Pasé algunos momentos de apuro, lo reconozco. Pero aprendí a arreglármelas<br />

bastante bien. Fue la única vez en mi vida en que mi aspecto raro resultó útil. Nadie<br />

sabía qué pensar de mí y al cabo de algún tiempo convencí a la mayoría de los otros<br />

internos de que estaba loco. Te pasmarías al ver que la gente te deja completamente en<br />

paz cuando piensan que estás pirado. En cuanto tienes esa expresión en los ojos, quedas<br />

inoculado contra los problemas.<br />

Y todo porque querías defender tus principios.<br />

-No fue tan duro. Por lo menos siempre supe por qué estaba allí. No tuve que<br />

torturarme con remordimientos.<br />

-Yo tuve suerte en comparación contigo. No pasé las pruebas físicas a causa del<br />

asma y nunca tuve que volver a preocuparme del asunto.<br />

-Así que te fuiste a Francia y yo me fui a la cárcel. Los dos nos fuimos a alguna<br />

parte y los dos hemos vuelto. Así pues, ahora estamos los dos en el mismo sitio.<br />

-Es una forma de verlo, supongo.<br />

-Es la única forma de verlo. Nuestros métodos fueron diferentes, pero los<br />

resultados fueron exactamente los mismos.<br />

Pedimos otra ronda de copas. Ésa llevó a otra, y luego a otra, y después a una<br />

tercera. En medio, el camarero nos invitó a un par de copas por cuenta de la casa, un<br />

acto de amabilidad que recompensamos rápidamente animándole a servirse una para él.<br />

Luego la taberna empezó a llenarse de clientes y nosotros fuimos a sentarnos a una<br />

mesa del fondo. No recuerdo todo lo que hablamos, pero el principio de aquella conversación<br />

lo tengo mucho más claro que el final. Para cuando llegamos a la última media<br />

hora o tres cuartos, tenía tanto bourbon en el cuerpo que literalmente veía doble. Esto<br />

no me había sucedido nunca y no tenía ni idea de cómo lograr que el mundo volviese a<br />

estar enfocado. Cada vez que miraba a Sachs, veía dos. Parpadear no me ayudaba y<br />

sacudir la cabeza sólo servía para que me mareara. Sachs se había convertido en un<br />

hombre con dos cabezas y dos bocas, y cuando finalmente me puse de pie para<br />

marcharme, recuerdo que me cogió con sus cuatro brazos justo cuando yo estaba a<br />

punto de caerme. Probablemente fue una buena cosa que hubiese dos Sachs aquella<br />

tarde. Yo era casi un peso muerto y dudo que un solo hombre hubiese podido llevarme.<br />

Sólo puedo hablar de las cosas que sé, las cosas que he visto con mis propios<br />

ojos y escuchado con mis propios oídos. Exceptuando a Fanny, es posible que yo fuera<br />

14

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!