10.05.2013 Views

número completo - Youkali, revista crítica de las artes y del ...

número completo - Youkali, revista crítica de las artes y del ...

número completo - Youkali, revista crítica de las artes y del ...

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

si ausencia, se hace presente en el poema. “Y se verán los niños”. Como ese nuevo niño yuntero que, al igual<br />

que el que viera Miguel Hernán<strong>de</strong>z, se va haciendo costra, corteza, endurecido como mineral, asfalto: “La ciudad<br />

avalancha/ <strong>de</strong> arena endurecida para tu pellejo,/ te va haciendo corteza, todo costra,” (p.61).<br />

Todo este dolor sin límite, este sufrimiento sin oril<strong>las</strong>, alcanza lo difícilmente soportable en el poema<br />

“Primera vez”. Dos estrofas, seis versos y allí todo el horror y un llanto imposible:<br />

“Sus noventa y siete quilos y toda<br />

su lujuria cayeron sobre tu pubis<br />

<strong>de</strong> nieve aún blanda.<br />

Si hay dios, que esta noche<br />

caiga <strong>de</strong> rodil<strong>las</strong> y llore<br />

todo lo creado”<br />

(p.76)<br />

En verdad “Nunca lloverá suficiente para lavar este asco” (p.75). ¿Mundo y palabra privados <strong>de</strong> esperanza?<br />

Suce<strong>de</strong> que no. Suce<strong>de</strong> que la poeta canta “junto al pájaro <strong>de</strong>rribado” y el poema, en esta última y breve sección<br />

<strong>de</strong>l libro, se abre a una esperanza necesaria. “Karuma: acción compasiva o acción emprendida para disminuir<br />

el sufrimiento ajeno” (p.82) Compasión, pa<strong>de</strong>cer con el otro, llegar a él, piedad nacida en el <strong>de</strong>sconsuelo, curando<br />

la herida.<br />

“Apertura <strong>de</strong> manos ante la cerrazón <strong>de</strong>l mundo (…) para recibir la epifanía <strong>de</strong> la lluvia o al pájaro moribundo<br />

(…) manos insistiendo en su vocación <strong>de</strong> gasa/ a pesar <strong>de</strong> todo”. (p.81). El poema no es una mentira seudo<br />

lírica que lave conciencias. Pero la palabra dicha en la noche, gritada sin voz <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el espanto, erigida <strong>de</strong>s<strong>de</strong> <strong>las</strong><br />

ruinas <strong>de</strong>l poema, abierta por mil heridas pue<strong>de</strong> ser consuelo. Sólo entonces. Porque ha mostrado lo real, y ha<br />

sido acogimiento. Porque “aunque es <strong>de</strong> noche” estamos aún y siempre “junto al pájaro herido”. Palabra-gasa<br />

por ser palabra-abierta; palabra que junta pedacitos <strong>de</strong> mundo y restituye sentido. Así los dos hermosísimos poemas<br />

finales:<br />

“Ver <strong>de</strong> una vez la palabra<br />

abrazando los pedacitos<br />

rotos <strong>de</strong>l mundo<br />

palabra gasa para la espalda dolida<br />

palabra abriendo sus costados<br />

para alojarte”<br />

(p.85)<br />

Pues <strong>de</strong> eso se trata: <strong>de</strong> abrazar, <strong>de</strong> abrazarnos. Recibir “la epifanía <strong>de</strong> la lluvia”, juntar manos, <strong>de</strong>cir<br />

<strong>de</strong>s<strong>de</strong> el silencio. De esta esperanza pequeñita y débil como un niño, necesaria como la lluvia o la palabra<br />

exacta, nos habla Laura Giordani:<br />

“Sólo querer ser árbol para abrazarte” (p.86)<br />

En Materia oscura el poema transita <strong>las</strong> regiones <strong>de</strong> lo invisible, el sufrimiento y la explotación infantil que es la<br />

“urdimbre oscura” que sostiene a <strong>las</strong> socieda<strong>de</strong>s <strong>de</strong> la opulencia. En el nuevo poemario <strong>de</strong> Laura Giordani,<br />

Noche sin clausura, lo que provoca la ceguera es casi un exceso <strong>de</strong> luz. Se trata <strong>de</strong> ver lo evi<strong>de</strong>nte, lo nimio, aquello<br />

en lo que no se repara. No per<strong>de</strong>r nunca el asombro ante el mundo, no claudicar ante la injusticia o el dolor:<br />

“Que la repetición no seque los pozos <strong>de</strong>l asombro”, “Que no se a<strong>de</strong>lgace el ángulo /<strong>de</strong>s<strong>de</strong> el que se contempla<br />

la infamia” se nos dice en el poema significativamente titulado “Plegaria <strong>de</strong> los párpados” (Noche sin clausura,<br />

p.279 RESEÑAS<br />

/ 177ANÁLISIS página 13 YOUKALI,<br />

).<br />

Hacen falta “ojos nuevos, ojos otros” “para ver/ el temblor íntimo <strong>de</strong> <strong>las</strong> cosas” y no la mirada complaciente<br />

ciega al íntimo temblor <strong>de</strong> la belleza o el dolor <strong>de</strong>l mundo: “No más ojos amansando mareas/ y tapiando con<br />

1885-477X<br />

9 A partir ahora indico sólo la página correspondiente <strong>de</strong> esta edición <strong>de</strong> Noche sin clausura . ISBN:

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!