número completo - Youkali, revista crítica de las artes y del ...
número completo - Youkali, revista crítica de las artes y del ...
número completo - Youkali, revista crítica de las artes y del ...
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
EL AFUERA DE LA LEY:<br />
SCHMITT, KELSEN Y LA RESISTENCIA LEGAL A LA LEY<br />
Quiero comenzar insistiendo en el carácter paradójiter contradictorio, ¿cómo podremos enten<strong>de</strong>r la exco<br />
o incluso contradictorio <strong>de</strong>l título que he elegido; presión “resistencia legal a la ley”? Con más preci-<br />
ese mismo carácter <strong>de</strong>l que el lector lo va a <strong>de</strong>spojar sión, si la ley que pue<strong>de</strong> ser resistida legalmente no<br />
casi inevitablemente en el acto mismo <strong>de</strong> leer. La re- es una ley concreta o un grupo particular <strong>de</strong> leyes, si<br />
sistencia legal a la ley pue<strong>de</strong> y, en cierto sentido, <strong>de</strong>- aquí no me estoy refiriendo a otra ley más primaria<br />
be ser interpretada como la resistencia legal a una ley que trascien<strong>de</strong> la ley civil y pue<strong>de</strong>, por ello, invocar-<br />
o algunas (pero no todas) <strong>las</strong> leyes; esto es, resistense contra ella, una referencia que esta asociada inevicia<br />
legal a alguna o algunas leyes que entran en contablemente con la i<strong>de</strong>a <strong>de</strong> justicia, ¿no concluyo en la<br />
flicto con leyes previamente existentes, formando en absurda i<strong>de</strong>a <strong>de</strong> una resistencia legal a la ley como<br />
consecuencia estas últimas un conjunto supuesta- tal, en su generalidad? Dado que he cerrado cualmente<br />
unificado y consistente <strong>de</strong> normas legales. Es quier fácil salida <strong>de</strong> este atolla<strong>de</strong>ro, he llegado al<br />
más, aquella ley o aquel<strong>las</strong> leyes que <strong>de</strong>ben resistir- punto en el que no tenemos otra opción que acudir<br />
se podrían, por introducir otro nivel <strong>de</strong> complejidad, a los dos gran<strong>de</strong>s filósofos <strong>de</strong>l <strong>de</strong>recho, Carl Schmitt<br />
entrar en conflicto no con la letra <strong>de</strong> la ley o conjun- y Hans Kelsen, cuya oposición ha <strong>de</strong>finido <strong>de</strong> forma<br />
to pre-existente <strong>de</strong> leyes, sino con su intención o es- creciente los gran<strong>de</strong>s dilemas políticos <strong>de</strong>l siglo XX,<br />
píritu, para lo que requerirían <strong>de</strong> un acto <strong>de</strong> a<strong>de</strong>cua- así como, y quizás incluso en mayor medida, los <strong>de</strong><br />
ción o <strong>de</strong> ajuste cuyo fracaso podría acarrear resis- la última década.<br />
tencia. Por llevar la cuestión al extremo, quizás la ley Es precisamente su importancia y, sobre todo, la<br />
a la que me refiero es algo así como la ley natural, un importancia <strong>de</strong> su mutua oposición la que nos exige<br />
supuesto conjunto <strong>de</strong> mandatos positivos y negati- que examinemos su pensamiento muy cuidadosa y<br />
vos, sobre cuyo origen podríamos no ponernos <strong>de</strong> <strong>de</strong>tenidamente, y por tanto también, ya que, como<br />
acuerdo, pero que es universalmente reconocido co- Althusser solía <strong>de</strong>cir, no existe lectura inocente, que<br />
mo válido; así, por seguir a Locke, el <strong>de</strong>recho <strong>de</strong> pro- examinemos la lectura <strong>de</strong> Schmitt y Kelsen no sólo inpiedad<br />
a lo que es <strong>de</strong> uno, incluido el propio ser, una dividualmente, en tanto que cuerpos discretos <strong>de</strong><br />
forma particular <strong>de</strong> propiedad (y aquí Locke sigue a pensamiento, sino consi<strong>de</strong>rando que éstos se <strong>de</strong>finen<br />
Hobbes) que nunca pue<strong>de</strong> ser enajenada, esto es, por el conflicto que los ha puesto en contacto, como<br />
vendida o entregada a otro, so pena <strong>de</strong> <strong>de</strong>jar <strong>de</strong> existir<br />
como persona. En este caso, y tanto Hobbes como<br />
Locke piensan en los extremos, <strong>las</strong> leyes civiles o artificiales,<br />
o sea, <strong>las</strong> que han sido hechas por los hombres,<br />
que contravienen la ley natural <strong>de</strong>ben ser resistidas<br />
no sólo porque entran en contradicción con leyes<br />
cuya existencia exterior y anterior a cualquier sociedad<br />
efectiva les confiere prioridad en todos los<br />
sentidos <strong>de</strong>l término, sino también porque <strong>las</strong> leyes<br />
civiles que violan <strong>las</strong> leyes <strong>de</strong> la naturaleza y, más específicamente,<br />
los <strong>de</strong>rechos que tales leyes otorgan,<br />
amenazan la existencia misma <strong>de</strong>l individuo humano<br />
que es tanto sujeto como objeto <strong>de</strong> la ley civil.<br />
Si carecemos <strong>de</strong> estas explicaciones, y por tanto<br />
<strong>de</strong> cualquier vía sencilla <strong>de</strong> evitar su flagrante carác-<br />
* .- La traducción es <strong>de</strong> Aurelio Sainz Pezonaga. Agra<strong>de</strong>cemos a Warren Montag su amabilidad por permitirnos traducir y publicar<br />
por Warren Montag*<br />
23¿DERECHO?<br />
página 13 YOUKALI, 1885-477X<br />
el artículo. ISBN: