09.05.2013 Views

Angusola y los cuchillos

Angusola y los cuchillos

Angusola y los cuchillos

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

216<br />

Mi prima Candita<br />

A <strong>los</strong> siete años un niño sabe muchas cosas que no entiende.<br />

Luego, con el tiempo, se van revelando, como en una<br />

placa, y cobran sentido. Así le puede haber ocurrido a Candita.<br />

Si alguien le preguntaba si sabía leer Candita le miraba,<br />

callada, a <strong>los</strong> ojos (y nadie podía leer nada en <strong>los</strong> suyos).<br />

Candita era rubia. Era clara. Era callada. Era linda.<br />

Su viejo, mi tío Antón, tuvo entonces un percance.<br />

Vivíamos puerta con puerta, por vuelta de lo que ahora<br />

es Orfila. Eso ha cambiado, ha hecho progresos. Hoy el<br />

barrio es distinto. Las dos casas eran de vieja madera y<br />

la de mi tío y su mujer, Elvira, tenía detrás, un terreno.<br />

Elvira empezó a plantar allí rosas rojas mientras él,<br />

Antón, que había sido marinero, y ahora era carrero,<br />

salía al trabajo.<br />

No voy a hablar aquí de nosotros: de mí, de mi viejo,<br />

de mi hermana Laurita... Esto es sobre Candita, y su<br />

viejo, y su silencio.<br />

Yo no sé realmente cómo fue el percance. Tío Antón<br />

no era dichoso, y las gentes (aquí y en España) lo habían<br />

maltratado. Era un hombre bajito, cuadrado, de<br />

boca botada y ojos muy negros. Con todo, Candita salió<br />

rubia, como Elvira, como un jabón que vendían entonces.<br />

Tío Antón no reía nunca; hablaba poco, y parecía<br />

llevar siempre un plomo por dentro. No era fuerte (había<br />

decaído) y su carro no era grande. Una mula vieja y<br />

chiquita tiraba de su carrito de dulces por las calles, a<br />

saltitos, como un culí. Yo creo que, en su alma, tío Antón<br />

no le pegaba realmente a la mula, sino a quienes a él le<br />

habían hecho daño, y contra <strong>los</strong> que nada podía. Y creo<br />

que cuando mató a aquel hombre que nunca vimos (sólo

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!