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TAHUANTINSUYO: El cóndor herido de muerte - Eumed.net

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eceptores, contribuyeron asimismo al mestizaje<br />

étnico.<br />

La historiografía tradicional andina –respecto <strong>de</strong><br />

los pueblos chavín, chanka o wari, e inka–, como la<br />

europea –respecto <strong>de</strong> los pueblos griego y romano–, y<br />

ambas –respecto <strong>de</strong> los conquistadores españoles–,<br />

han empleado miles <strong>de</strong> páginas y esfuerzo en pon<strong>de</strong>rar<br />

la “difusión cultural” que llevaron a cabo las naciones<br />

imperiales.<br />

¿Qué otra cultura sino la propia y única que conocían,<br />

podían difundir en los territorios conquistados<br />

los rústicos soldados y/o comerciantes <strong>de</strong> las naciones<br />

imperialistas? ¿Qué <strong>de</strong> pon<strong>de</strong>rable tiene que un hombre<br />

haga lo único que sabe hacer?<br />

¿Pue<strong>de</strong> consi<strong>de</strong>rarse especialmente meritorio el<br />

mestizaje, sincretismo, integración u homogeneización<br />

cultural –e incluso étnica– que en mayor o menor<br />

medida logran concretar las naciones hegemónicas entre<br />

los pueblos que sojuzgan?<br />

Son infinitas las evi<strong>de</strong>ncias <strong>de</strong> cuánto rechazo y<br />

<strong>de</strong>sprecio pusieron <strong>de</strong> manifiesto los conquistadores<br />

–en todos los rincones <strong>de</strong>l pla<strong>net</strong>a– hacia todas las formas<br />

<strong>de</strong> mestizaje –sincretismo, integración y homogeneización–<br />

a que daba lugar con su actuación.<br />

Es suficiente ese rechazo sistemático al mestizaje<br />

étnico y cultural como evi<strong>de</strong>ncia <strong>de</strong> que dicho logro<br />

no estaba entre sus objetivos; como evi<strong>de</strong>ncia <strong>de</strong> que,<br />

más allá <strong>de</strong> la voluntad <strong>de</strong> los conquistadores, les resultaba<br />

una <strong>de</strong>sagradable “secuela” <strong>de</strong> sus conquistas.<br />

Muy a su pesar, el mestizaje étnico y cultural era<br />

el inexorable precio que <strong>de</strong>bían pagar a cambio <strong>de</strong> la<br />

riqueza usurpada a los pueblos conquistados, usurpación<br />

que sí estaba <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> sus objetivos.<br />

¿A título <strong>de</strong> que, pues, la historiografía tradicional<br />

sigue reivindicando para los conquistadores lo que éstos<br />

abiertamente siempre rechazaron? ¿Por qué ese<br />

empeño en lucir más papistas que el Papa? ¿Cuál el<br />

mérito <strong>de</strong> aquello que obtuvieron las naciones imperialistas<br />

como resultado inevitable e inexorable <strong>de</strong> sus<br />

conquistas?<br />

En momento también remoto habían aparecido<br />

otras dos modalida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> mitimaes.<br />

En efecto, no siempre entre los prisioneros <strong>de</strong><br />

guerra que capturaba el conquistador estaban<br />

Fuerzas <strong>de</strong><br />

ocupación<br />

Gráfico Nº 10<br />

Flujo ampliado <strong>de</strong> mitimaes<br />

Pueblo conquistador<br />

Especialistas<br />

a apren<strong>de</strong>r<br />

Prisioneros<br />

<strong>de</strong> guerra<br />

Pueblo conquistado<br />

Especialistas<br />

a enseñar<br />

los especialistas o los hombres más capaces<br />

<strong>de</strong>l pueblo conquistado. Y, a la inversa, las<br />

tropas enviadas a controlar el territorio anexado,<br />

necesariamente no eran las más a<strong>de</strong>cuadas<br />

para asimilar los sofisticados conocimientos<br />

o técnicas que eventualmente poseían<br />

los vencidos.<br />

Así, era menester trasladar, en ambas direcciones,<br />

contingentes <strong>de</strong> especialistas capaces<br />

<strong>de</strong> enten<strong>de</strong>rse con sus pares. <strong>El</strong> objetivo,<br />

por cierto, no era buscar el beneficio mutuo.<br />

Sino más bien, que el conquistador pudiera<br />

extraer y asimilar <strong>de</strong>l vencido todo cuanto<br />

conocimiento convenía arrebatarle.<br />

Prisioneros <strong>de</strong> guerra y especialistas, en<br />

dirección a las tierras <strong>de</strong>l conquistador, y<br />

fuerzas <strong>de</strong> ocupación y especialistas <strong>de</strong> éste,<br />

en dirección a los territorios dominados, conformaban<br />

el cuadro amplio <strong>de</strong> mitimaes que<br />

había aparecido en los pueblos y naciones<br />

andinas ya durante el período preinkaico<br />

–como afirman Franklin Pease y Liliana Regalado<br />

317 –.<br />

Relacionaban al pueblo hegemónico con<br />

los pueblos dominados. Así, como intercambio<br />

bidireccional, la institución <strong>de</strong> los mitimaes<br />

se mantuvo en los An<strong>de</strong>s durante muchos<br />

siglos, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> mucho antes incluso que<br />

surgiera el Imperio Inka.<br />

<strong>TAHUANTINSUYO</strong>: <strong>El</strong> <strong>cóndor</strong> <strong>herido</strong> <strong>de</strong> <strong>muerte</strong> • Alfonso Klauer 84

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