Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
La vigilia de la aldea<br />
De identidades e inminencias<br />
Luis Vicente de Aguinaga<br />
Jorge Ortega, Guía de forasteros, Bonobos/Conaculta, Toluca, 2014, 121 p.<br />
Conviene preguntar y preguntarse de vez<br />
en cuando con qué suerte ha corrido el<br />
clasicismo poético en México. En su día,<br />
Jorge Cuesta dijo con buen estilo y mejores<br />
argumentos que la poesía europea<br />
se implantó en México en el más universal<br />
de sus avatares, el petrarquista, de<br />
modo que su desarrollo posterior obedeció<br />
a ese origen como se obedece a un<br />
condicionamiento estructural, no como se<br />
responde a un mero incidente. Universal,<br />
el modo petrarquista lo fue por sus aspiraciones,<br />
desde luego, pero también<br />
por su influencia. Petrarquistas fueron<br />
Ronsard, Garcilaso, Shakespeare y Sor<br />
Juana, cada cual a su modo. No lo han<br />
sido menos Pedro Salinas, Pablo Neruda,<br />
Rubén Bonifaz Nuño, Jaime Sabines<br />
y Javier Sicilia. Cuando se afirma<br />
que determinada poesía moderna tiende<br />
al clasicismo, lo cierto es que tiende<br />
al petrarquismo.<br />
No estoy hablando de tal o cual academicismo<br />
literario. Muchos, generalmente<br />
con malas intenciones, califican<br />
de académicos a los poetas que juzgan<br />
conservadores o incluso timoratos. Pero,<br />
a decir verdad, ¿cómo podrían existir<br />
poetas académicos en México si no se<br />
han mantenido –en caso de haber existido<br />
alguna vez– auténticas academias de<br />
poesía, escuelas que fomenten el aprendizaje<br />
de los estilos, temas y preceptos<br />
que pueden, en rigor, llamarse clásicos?<br />
Al menos en México, la nobleza del clasicismo<br />
es la del autodidactismo. En el<br />
siglo xx y lo que ha transcurrido del xxi,<br />
los petrarquistas lo han sido porque han<br />
decidido aprender a serlo, y lo que<br />
han aprendido lo han aprendido por sus<br />
propios medios. De las generaciones<br />
más recientes de poetas mexicanos, casos<br />
como los de Jorge Fernández Granados,<br />
Marcos Davison, Jorge Ortega y<br />
Hernán Bravo Varela ilustran, con las<br />
diferencias propias de cada caso, este<br />
fenómeno.<br />
No ignoro que Ortega, estilista de mag<br />
137