12.07.2015 Views

Las Sabanas de Barinas - MinCI

Las Sabanas de Barinas - MinCI

Las Sabanas de Barinas - MinCI

SHOW MORE
SHOW LESS
  • No tags were found...

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

Cuando llegó al paso apenas se <strong>de</strong>tuvo, lanzándose al pronto<strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> la ciénaga, que le daba al caballo por el pecho, y apoco andar paróse junto a la palmera; pasó la vista en torno conansiedad, pero al primer momento no advirtió vestigio alguno<strong>de</strong> aquélla a quien esperaba encontrar allí, porque Juanita,dudosa <strong>de</strong>que fuera o no su primo, y aterrada ante la i<strong>de</strong>a <strong>de</strong>encontrarse en aquel sitio con un <strong>de</strong>sconocido, a tales horas y enmedio <strong>de</strong> tan completa soledad, se había ocultado <strong>de</strong>trás <strong>de</strong> unárbol. Con una exclamación <strong>de</strong> <strong>de</strong>sengaño preparábase ya a proseguirla marcha en su tembloroso corcel, cuando Juanita, queal punto le había reconocido por la voz, salió <strong>de</strong> su escondrijo yse <strong>de</strong>tuvo ante él; el teniente saltó <strong>de</strong> su caballo y la estrechóentre sus brazos, antes que ella pensara evitar el apretón; sinembargo, al reponerse <strong>de</strong> la emoción, <strong>de</strong>sprendiese <strong>de</strong> él en elacto y ambos primos se contemplaron en silencio por algunosinstantes.<strong>Las</strong> facciones <strong>de</strong> uno y <strong>de</strong> otro habían pa<strong>de</strong>cido escasa alteración,pero Castro observó con regocijo y admiración la mejoraque unos pocos años lograron efectuar en la no bien <strong>de</strong>sarrolladaaún, pero interesante compañera <strong>de</strong> su niñez, que se le aparecíaconvertida en una floreciente trigueña <strong>de</strong> dieciocho primaveras.Juanita contemplaba asimismo con cariñoso orgullo elsemblante varonilmente hermoso y la gallarda figura <strong>de</strong> suprimo, a quien recordaba como un joven airoso pero agreste,dado como nadie a las diversiones, pero más bien tímido queaudaz en compañía <strong>de</strong> personas extrañas. Cuando por fin pudieronhablarse hiciéronse tantas y tan rápidas preguntas que no eraposible contestarlas. Juanita fue la primera en pensar que eltiempo huía y que estaban expuestos a que se les <strong>de</strong>scubriese sino se marchaban inmediatamente, pero tuvo sin embargo laagradable sorpresa <strong>de</strong> saber que su primo se proponía seguirla alcampamento patriota.“¿Será posible, querido Andrés, que en realidad hayas resueltoabandonar la compañía <strong>de</strong> los opresores y asoladores <strong>de</strong> tupatria? Páez te recibirá con regocijo, y mi padre, que siempre ha185

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!