12.07.2015 Views

Las Sabanas de Barinas - MinCI

Las Sabanas de Barinas - MinCI

Las Sabanas de Barinas - MinCI

SHOW MORE
SHOW LESS
  • No tags were found...

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

<strong>de</strong> diez días fui <strong>de</strong>vuelto a mi hacienda, en Peñuelas, don<strong>de</strong>supe, como lo imagine <strong>de</strong> antemano, que casi todos los hombres<strong>de</strong> mi guerrilla habían regresado a sus respectivas casas, puesmuy pocos perecieron en la <strong>de</strong>rrota <strong>de</strong> Maracaibo, porque sedispersaron inmediatamente al faltarles yo y se retiraron pordiversos caminos.“Tan pronto como pu<strong>de</strong> montar otra vez a caballo reuní migente y salí a incorporarme con Miranda, a quien encontré disciplinandosu ejército para oponerse a un ataque <strong>de</strong> Montever<strong>de</strong>,jefe enemigo que había sido reforzado con nuevas tropas <strong>de</strong>Cartagena, <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> la última batalla campal. Todos uste<strong>de</strong>ssaben el infausto suceso <strong>de</strong> aquella campaña, en que yo ymuchos otros patriotas caímos en po<strong>de</strong>r <strong>de</strong> los españoles, quenos encerraron en las tenebrosas casamatas <strong>de</strong> La Guaria. Deboconfesar que me entregué a la <strong>de</strong>sesperación ante aquel inesperadorevés <strong>de</strong> la fortuna, pues cuando oí el agrio rechinar <strong>de</strong> lapesada puerta <strong>de</strong> hierro que se cerraba tras <strong>de</strong> nosotros, tuve elhondo presentimiento <strong>de</strong> que la mazmorra no se abriría másnunca, al menos para mí, hasta el día fijado para conducirme albanquillo fatal.“El calabozo en que yo estaba recluido, junto con casi cerca<strong>de</strong> cien compañeros <strong>de</strong> <strong>de</strong>sgracia, consistía en una pieza abovedada,que no media más <strong>de</strong> quince pies <strong>de</strong> longitud por doce <strong>de</strong>anchura, situada <strong>de</strong>bajo <strong>de</strong> uno <strong>de</strong> los bastiones que formaban lafortificación <strong>de</strong> la rada. El piso estaba pavimentado con gran<strong>de</strong>spiedras redondas que duras como eran, nos servían. Cuando nosacostábamos, para preservar nuestros cuerpos contra la humedad<strong>de</strong>l suelo, empapado perpetuamente por la helada lloviznaque rezumía <strong>de</strong>l combo techo. Por el número <strong>de</strong> prisioneros,muchos <strong>de</strong> ellos heridos, pero que en vano imploraban que losenviasen a un hospital —y por el muy reducido espacio en queestaban amontonados, sin que se prestase la más mínima atencióna sus pa<strong>de</strong>cimientos, uste<strong>de</strong>s podrán suponer con facilidadque tendríamos poco trecho para acostarnos a todo lo largosimultáneamente. Durante el día la mitad <strong>de</strong> ellos veíase forza-232

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!