12.07.2015 Views

Las Sabanas de Barinas - MinCI

Las Sabanas de Barinas - MinCI

Las Sabanas de Barinas - MinCI

SHOW MORE
SHOW LESS
  • No tags were found...

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

pientes <strong>de</strong> agua y 1os caimanes en acecho, pues apenas existenallí las angostas veredas <strong>de</strong>l ganado, que solo van <strong>de</strong> las sabanasa la orilla <strong>de</strong> los ríos. En consecuencia, Ancáfila se vió prontoen la absoluta necesidad <strong>de</strong> conseguir algún medio <strong>de</strong> bajar porel agua y felizmente hizo memoria <strong>de</strong> que su marido había terminadouna liviana canoa <strong>de</strong> corteza a propósito para ella, y queél guardaba en la próxima caverna <strong>de</strong> Zaraguaca, don<strong>de</strong> solíaentretenerse pintándola con onoto y adornándola con esculturas.“Corrió allí, a través <strong>de</strong> la sabana, con la velocidad <strong>de</strong> unantílope espantado y en breve llegó a la oscura boca <strong>de</strong> la cuevaque bajo cualesquiera otras circunstancias le habría inspiradotemores supersticiosos; sin embargo penetró, aunque con pasoinseguro y corazón palpitante, porque comúnmente se dice quetales cavernas son la morada <strong>de</strong> genios malignos y <strong>de</strong> almas enpena; y ya casi había llegado al sitio don<strong>de</strong> últimamente viera lacanoa colocada entre dos gran<strong>de</strong>s esta1áctitas <strong>de</strong> espato, cuandollegó a sus aterrados oídos una profunda queja, que parecía proce<strong>de</strong>r<strong>de</strong> un ser sumno, abrumado <strong>de</strong> dolor y <strong>de</strong>sfallecimiento.Al primer instante, quiso retroce<strong>de</strong>r y huir, pero recordó a suhijo y esta i<strong>de</strong>a le comunicó aliento para afrontar lo peor quepudiera ocurrirle, antes que insistir <strong>de</strong> su empresa; ya podía distinguirla diminuta canoa medio envuelta en la penumbra <strong>de</strong> lacaverna, cuando, al ten<strong>de</strong>r las manos para alcanzarla, tropezócon un hombre tendido en tierra y oyó su nombre débilmentepronunciado por la bien conocida voz <strong>de</strong>l cacique Chanabilú.“Aunque al principio apenas podía hablar, poco a poco recobrósuficiente fuerza para explicarle que una <strong>de</strong> sus propias flechas,untada con el mortal veneno urali se había <strong>de</strong>sprendido <strong>de</strong>la herida <strong>de</strong> un tucán, mientras éste revoloteaba sobre su cabezaentre las ramas <strong>de</strong> un congrio, rozándole un tobillo levemente,pero lo bastante para comunicarle a la sangre una porciónmuy activa <strong>de</strong>l tósigo. Como en aquel momento se hallaba distante<strong>de</strong> los <strong>de</strong>más cazadores, persiguiendo un venado, habíasearrastrado hasta la caverna con la esperanza <strong>de</strong> po<strong>de</strong>r echar la272

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!