CADS10 Castellano. 2006 - Generalitat de Catalunya

ampliamente, de sostenibilidad. El carácter central de la EAE se basa, según esta
aproximación, en el conocimiento de las prácticas de toma de decisiones más que
en les variables ambientales que puedan intervenir (Dalkman et al., 2002).
Es este cambio de centro de gravedad lo que permite introducir una de las aportaciones
de las últimas décadas del siglo XX en los modelos de conocimiento: la aparición
de la complejidad y la incertidumbre. En efecto, el hecho de centrar el análisis en el
proceso de decisión posibilita un tratamiento mucho más contingente, sin las
aspiraciones de objetividad propias de la EIA. Las políticas, programas y planes consideran
típicamente hechos inciertos, valores e intereses en disputa y decisiones urgentes
ante los que es ilusorio pensar en soluciones racionales. En estas circunstancias la
apuesta de la EAE es la de aportar soluciones de calidad, que incorporen la
participación y la transparencia, sin obviar el trabajo analítico que tiene que dar apoyo
a todo el proceso.
Para poder dar respuesta a los retos planteados, la EAE debe hacer énfasis en la
integración. El proyecto ENPLAN (2004) tiene como objetivo el establecimiento de
una cooperación transnacional entre diversas regiones europeas de Italia y del
estado español para elaborar una metodología común y consensuada para la
aplicación de la evaluación ambiental estratégica en planes y programas a nivel regional.
Para ENPLAN (2004), el significado clave de la EAE radica precisamente en su
capacidad de integrar y hacer coherente el proceso de planificación para orientarlo
hacia la sostenibilidad. La integración se traduce a un triple nivel: la integración
procedimental, mediante el mantenimiento de una interacción positiva y creativa entre
la planificación y la evaluación durante todo el proceso de formulación y redacción
del plan; la integración organizativa, que permita la comunicación y coordinación de
los diferentes entes y órganos de la administración implicados en el plan; y finalmente,
la integración temática, que considera conjuntamente los aspectos ambientales, sociales
y económicos para hacer un auténtico análisis de sostenibilidad.
Es preciso advertir aquí que la EAE, como instrumento, es de hecho un constructo
sociopolítico –o como mínimo político, dependiendo del grado de apertura de los procesos
desarrollados para su definición– de forma que cada nivel político-territorial “construye”
el significado de la EAE. Así pues, a pesar de las interpretaciones amplias de la EAE
de Sadler & Verheem o de ENPLAN, muchos ámbitos político-territoriales han hecho
interpretaciones más restringidas. Éste sería, por ejemplo, el caso de la UE.
La Directiva 2001/42/CE de junio de 2001 (relativa a la evaluación de los efectos de
determinados planes y programas sobre el medio ambiente) es la aportación de la
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