Lo lícito e ilícito en el Islam (por Dr. Yusuf Al-Qaradawy)
Lo lícito e ilícito en el Islam (por Dr. Yusuf Al-Qaradawy)
Lo lícito e ilícito en el Islam (por Dr. Yusuf Al-Qaradawy)
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
<strong>Lo</strong> <strong>lícito</strong> e i<strong>lícito</strong> <strong>en</strong> <strong>el</strong> <strong>Islam</strong> (<strong>por</strong> <strong>Dr</strong>. <strong>Yusuf</strong> <strong>Al</strong>-<strong>Qaradawy</strong>)<br />
padre adoptivo y de la de su esposa, privando a los justos y verdaderos familiares de su<br />
her<strong>en</strong>cia. Tal situación causa la ira de los verdaderos familiares contra <strong>el</strong> intruso que se<br />
<strong>en</strong>tromete y les usurpa sus derechos, privándolos de su her<strong>en</strong>cia completa.[112]<br />
Tal s<strong>en</strong>timi<strong>en</strong>to frecu<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te causa conflictos que llevan a la rotura de r<strong>el</strong>aciones<br />
<strong>en</strong>tre los familiares. Por eso es que <strong>el</strong> Corán abolió este sistema de la Yahilía,<br />
prohibiéndolo totalm<strong>en</strong>te y erradicando todas sus consecu<strong>en</strong>cias. <strong>Al</strong>lah dice: "<strong>Al</strong>lah no<br />
ha puesto dos corazones <strong>en</strong> <strong>el</strong> pecho de ningún hombre... Ni ha hecho que vuestros<br />
hijos adoptivos sean vuestros propios hijos. Eso es lo que vuestras bocas dic<strong>en</strong>. <strong>Al</strong>lah,<br />
empero, dice la verdad y conduce <strong>por</strong> <strong>el</strong> camino. Llamadles <strong>por</strong> su padre. Es más<br />
equitativo ante <strong>Al</strong>lah. Y, si no sabéis quién es su padre, que sean vuestros hermanos<br />
<strong>en</strong> r<strong>el</strong>igión y vuestros protegidos. No incurrís <strong>en</strong> culpa si <strong>en</strong> <strong>el</strong>lo os equivocáis, pero sí<br />
si lo hacéis d<strong>el</strong>iberadam<strong>en</strong>te. <strong>Al</strong>lah es indulg<strong>en</strong>te, misericordioso". (33:4-5)<br />
Analicemos las palabras d<strong>el</strong> Corán: "Ni ha hecho que vuestros hijos adoptados sean<br />
vuestros verdaderos hijos. Eso es lo que vuestras bocas dic<strong>en</strong>". Esto significa que la<br />
declaración de adopción consiste <strong>en</strong> palabras que no correspond<strong>en</strong> a la realidad<br />
objetiva. Un mero pronunciami<strong>en</strong>to no cambia la realidad, ni altera los hechos, m<strong>en</strong>os<br />
hace de un extraño un pari<strong>en</strong>te o de un individuo adoptado un hijo. Una mera expresión<br />
verbal o un b<strong>el</strong>lo discurso no podrán hacer que la sangre de un hombre corra <strong>por</strong> las<br />
v<strong>en</strong>as d<strong>el</strong> hijo adoptado; tampoco podrán transferir las características g<strong>en</strong>éticas sin los<br />
rasgos físicos, m<strong>en</strong>tales o sicológicos.<br />
El <strong>Islam</strong> abolió todos los efectos de este sistema de adopción que están r<strong>el</strong>acionados con<br />
la her<strong>en</strong>cia y con la prohibición de casarse con la viuda o la esposa divorciada d<strong>el</strong> hijo<br />
adoptado. En asuntos de her<strong>en</strong>cia, <strong>el</strong> Corán no reconoce ningún derecho excepto <strong>el</strong><br />
basado <strong>en</strong> r<strong>el</strong>aciones de sangre o matrimonio: "... los unidos <strong>por</strong> lazos de<br />
consanguinidad están más cerca unos de otros. <strong>Al</strong>lah es omnisci<strong>en</strong>te." (8:75)<br />
Respecto al matrimonio, El Corán declaró que sólo las esposas de los hijos verdaderos,<br />
no las esposas de los adoptados, quedan perman<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te prohibidas de desposar para<br />
<strong>el</strong> padre, "... las esposas de vuestros propios hijos" (4:23). De esta manera; es<br />
permitido que un hombre se case con la mujer que su hijo adoptado haya divorciado,<br />
pues <strong>el</strong>la es, de hecho, la esposa de un "extraño" que no está r<strong>el</strong>acionado con él <strong>por</strong><br />
lazos consanguíneos.<br />
UN CLARO EJEMPLO DE LA ABOLICIÓN DE LA ADOPCION LEGAL<br />
La costumbre de adoptar hijos estaba muy arraigada <strong>en</strong> la sociedad árabe preislámica y<br />
no sería fácil extirparla de la m<strong>en</strong>te de los árabes. Pero <strong>Al</strong>lah deseaba erradicarla junto<br />
con sus efectos, no solo con palabras si no con hechos. Para que todas las dudas<br />
respecto al tema qued<strong>en</strong> despejadas, para que los crey<strong>en</strong>tes si<strong>en</strong>tan más confianza para<br />
poder casarse con las mujeres divorciadas <strong>por</strong> sus hijos adoptivos y, más que todo, para<br />
que sepan que lo Halal es lo que <strong>Al</strong>lah ha permitido y que lo Haram es sólo lo que <strong>Al</strong>lah<br />
ha prohibido, <strong>Al</strong>lah <strong>el</strong>igió al mismo Profeta (B y P) para esta tarea.<br />
Zaid bin Háritha, conocido como Zaid bin Muhammad, se casó con una prima d<strong>el</strong><br />
Profeta (B y P) Zainab bint Yahsh. Pero Zaid y Zainab no eran f<strong>el</strong>ices juntos, <strong>el</strong><br />
disgusto de Zaid <strong>por</strong> su esposa fue <strong>en</strong> aum<strong>en</strong>to, quejándose frecu<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te al Profeta (B<br />
y P). A pesar que <strong>el</strong> Profeta (B y P) sabía, <strong>por</strong> la rev<strong>el</strong>ación divina, que Zaid divorciaría<br />
a Zainab y que él se casaría luego con <strong>el</strong>la, su debilidad humana lo dominaba a veces y<br />
temía <strong>en</strong>carar a la g<strong>en</strong>te. Por eso, cada vez que Zaid se quejaba de su esposa, <strong>el</strong> Profeta<br />
(B y P) le solía decir, "mantén a tu esposa y teme a <strong>Al</strong>lah". En ese mom<strong>en</strong>to <strong>Al</strong>lah <strong>el</strong><br />
<strong>Al</strong>tísimo rev<strong>el</strong>ó algunos versos d<strong>el</strong> Corán amonestando al Profeta (B y P) y, a la vez,<br />
fortificando su voluntad para <strong>en</strong>fr<strong>en</strong>tar a la sociedad demoli<strong>en</strong>do los reman<strong>en</strong>tes de este<br />
sistema antiguo, <strong>en</strong> este caso, la práctica establecida que prohibía a un hombre casarse<br />
113