Lo lícito e ilícito en el Islam (por Dr. Yusuf Al-Qaradawy)
Lo lícito e ilícito en el Islam (por Dr. Yusuf Al-Qaradawy)
Lo lícito e ilícito en el Islam (por Dr. Yusuf Al-Qaradawy)
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
<strong>Lo</strong> <strong>lícito</strong> e i<strong>lícito</strong> <strong>en</strong> <strong>el</strong> <strong>Islam</strong> (<strong>por</strong> <strong>Dr</strong>. <strong>Yusuf</strong> <strong>Al</strong>-<strong>Qaradawy</strong>)<br />
140<br />
CAPITULO IV (3ª PARTE)<br />
LO LICITO Y LO ILICITO EN LA VIDA DIARIA DEL<br />
MUSULMAN<br />
FORMAS ILÍCITAS DE COSECHA COMPARTIDA<br />
El Profeta (B y P) prohibió a sus sahabis que practiqu<strong>en</strong> otra forma de siembra<br />
compartida que era muy común <strong>en</strong> tal época. El terrat<strong>en</strong>i<strong>en</strong>te daba su tierra con la<br />
condición de que se le <strong>en</strong>tregue la producción de cierta área y que <strong>el</strong> resto quede para <strong>el</strong><br />
cultivador; o que <strong>el</strong> terrat<strong>en</strong>i<strong>en</strong>te reciba una <strong>por</strong>ción (determinada <strong>por</strong> peso o medida)<br />
específica de grano y que <strong>el</strong> resto sea para <strong>el</strong> cultivador. Pero a veces una parte de la<br />
tierra producía y la otra no, de manera que uno de los dos no recibía nada o recibía muy<br />
poco, mi<strong>en</strong>tras que <strong>el</strong> otro recibía todo. Así también, si la producción total no excedía<br />
<strong>el</strong> peso o la medida especifica, <strong>el</strong> terrat<strong>en</strong>i<strong>en</strong>te recibía todo y <strong>el</strong> cultivador no recibía<br />
nada.<br />
Tal transacción claram<strong>en</strong>te <strong>en</strong>vu<strong>el</strong>ve gran incertidumbre y riesgo, y es contraria al<br />
espíritu de justicia. El Profeta (B y P) vio que la justicia demanda que ambos<br />
compartan d<strong>el</strong> total de la producción, sea esta mucha o poca, de acuerdo a la<br />
distribución previam<strong>en</strong>te acordada. Se debe distribuir según pro<strong>por</strong>ciones de la<br />
producción total. Así, si la cosecha es abundante, lo será para ambos; y si es magra, lo<br />
será para ambos; y si no se produce nada, ninguno recibirá nada. Esta es una justa<br />
distribución para ambas partes. <strong>Al</strong> Bujari cita a Rafi' bin Jadiy dici<strong>en</strong>do: "T<strong>en</strong>íamos las<br />
mayores tierras de cultivo <strong>en</strong> Medina; alguno de nosotros solía r<strong>en</strong>tar su tierra<br />
designando un área de <strong>el</strong>la para sí. A veces, una calamidad azotaba esa parte mi<strong>en</strong>tras<br />
que <strong>el</strong> resto quedaba a salvo. Otra veces era al contrario. En consecu<strong>en</strong>cia, <strong>el</strong> Profeta (B<br />
y P) nos prohibió hacer así".<br />
Muslím cita a Rafi' bin Jaday dici<strong>en</strong>do: "La g<strong>en</strong>te solía arr<strong>en</strong>dar sus tierras <strong>en</strong> la época<br />
d<strong>el</strong> Profeta (B y P) a cambio de lo que producían las orillas de los arroyos o los bordes<br />
de los campos o a cambio de una cantidad prefijada de la producción. A veces sucedía<br />
que la parte reservada era destruida mi<strong>en</strong>tras que la otra quedaba a salvo y otras veces<br />
sucedía al contrario; y la g<strong>en</strong>te no t<strong>en</strong>ía otra inversión sino esta". Así es que <strong>el</strong> Profeta<br />
(B y P) Prohibió esta práctica.<br />
<strong>Al</strong> Bujari, nuevam<strong>en</strong>te, cita que Rafi' bin Jady dijo que <strong>el</strong> Profeta (B y P) preguntó:<br />
"¿Qué hacéis con vuestras tierras agrícolas?" La g<strong>en</strong>te dijo: "Las arr<strong>en</strong>damos, a<br />
cambio de (la producción de) un cuarto d<strong>el</strong> área o una medida de grano o dátiles". El<br />
Profeta (B y P) les dijo: "No hagáis así". <strong>Lo</strong> que se quiere decir aquí es que <strong>el</strong><br />
terrat<strong>en</strong>i<strong>en</strong>te tomaba esa cantidad prefijada como un pago <strong>por</strong> servicios y a veces<br />
compartía <strong>en</strong> cierta pro<strong>por</strong>ción <strong>el</strong> resto; <strong>por</strong> ejemplo, toda la producción de los tres<br />
cuartos restantes.<br />
Observamos aquí que <strong>el</strong> Profeta (B y P) estaba ansioso <strong>por</strong> establecer una justicia<br />
perfecta <strong>en</strong> su sociedad y <strong>por</strong> remover cualquier causa de conflicto y discordia de la<br />
comunidad de los crey<strong>en</strong>tes. Zaid bin Thábit narró que dos personas se pres<strong>en</strong>taron ante<br />
<strong>el</strong> Profeta (B y P) disputando sobre cierta tierra y él les dijo: "Si esto es lo que pasa<br />
<strong>en</strong>tre vosotros, pues no prestéis así vuestras labranzas"[1].<br />
El propietario y <strong>el</strong> cultivador deb<strong>en</strong>, pues, ser magnánimos y g<strong>en</strong>erosos uno con otro, <strong>el</strong><br />
propietario no debe demandar una <strong>por</strong>ción muy alta de la cosecha y <strong>el</strong> agricultor debe<br />
cuidar bi<strong>en</strong> de la tierra. Ibn Abbás dijo que <strong>el</strong> Profeta (B y P) no prohibió la siembra<br />
compartida sino que aconsejó al propietario y al agricultor ser considerados <strong>en</strong>tre <strong>el</strong>los<br />
[2]. Y cuando algui<strong>en</strong> dijo a Taús "¡Oh Abu Abdur Rahmán! ¿Porqué no abandonas la