25.11.2014 Views

SALIR de la POBREZA - Observatorio de la Cooperación ...

SALIR de la POBREZA - Observatorio de la Cooperación ...

SALIR de la POBREZA - Observatorio de la Cooperación ...

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

Combatir <strong>la</strong> extrema pobreza 275<br />

En <strong>la</strong> ciudad, el entorno social <strong>de</strong> Paul cambió totalmente. A diferencia <strong>de</strong> <strong>la</strong> al<strong>de</strong>a,<br />

nada era familiar y no tenía a nadie cerca. Como todos los niños que en <strong>la</strong>s calles,<br />

podía ser humil<strong>la</strong>do por <strong>la</strong> sospecha y el <strong>de</strong>sagrado que con frecuencia <strong>la</strong> gente le<br />

<strong>de</strong>mostraba. Ya no tenía <strong>la</strong>s re<strong>la</strong>ciones sociales que requería para usar los comportamientos<br />

y valores que había aprendido con su familia. El límite entre lo bueno y lo<br />

malo se <strong>de</strong>svaneció.<br />

Primer retorno a <strong>la</strong> al<strong>de</strong>a: apren<strong>de</strong>r a vivir juntos otra vez<br />

Des<strong>de</strong> comienzos <strong>de</strong> 1997, Paul fue invitado en numerosas ocasiones a ir a Courtyard<br />

of Hundred Tra<strong>de</strong>s para participar en un taller. 4 Se tomó su tiempo para <strong>de</strong>cidirse a<br />

hacerlo, aceptando so<strong>la</strong>mente en septiembre <strong>de</strong> ese año. Para que los niños puedan<br />

participar durante toda <strong>la</strong> semana <strong>de</strong> activida<strong>de</strong>s y lograr lo máximo <strong>de</strong> esta experiencia,<br />

se acostumbra pagarles un sa<strong>la</strong>rio durante el taller. Cuando se le preguntó qué iba<br />

a hacer con este dinero, Paul dijo que había <strong>de</strong>cidido usarlo para regresar a su al<strong>de</strong>a.<br />

“Yo vi que lo que estaba haciendo en <strong>la</strong>s calles no era bueno. Usted no <strong>de</strong>be <strong>de</strong>jar a su<br />

familia así. Debe ayudar a sus padres cuando ya no tengan fuerzas para trabajar”.<br />

Al final <strong>de</strong>l taller, Paul fijó una fecha con el equipo <strong>de</strong>l Courtyard según el cual regresaría<br />

y p<strong>la</strong>nearía su regreso a <strong>la</strong> al<strong>de</strong>a. Sin embargo, no se presentó. Después <strong>de</strong> algunas<br />

semanas el equipo fue a buscar a Paul y lo encontró bajo <strong>la</strong> influencia <strong>de</strong> <strong>la</strong>s drogas en el<br />

área cerca <strong>de</strong> <strong>la</strong> Gran Mezquita en el centro <strong>de</strong>l pueblo. Era mediados <strong>de</strong> diciembre.<br />

Como se acordó, Paul llegó al Courtyard un par <strong>de</strong> días <strong>de</strong>spués. Repitió su <strong>de</strong>terminación<br />

<strong>de</strong> regresar a casa antes <strong>de</strong> Navidad, y para animarlo, un miembro <strong>de</strong>l<br />

equipo se ofreció a acompañarlo. Paul regresó a su al<strong>de</strong>a el 20 <strong>de</strong> diciembre <strong>de</strong> 1997.<br />

Hacía casi cerca <strong>de</strong> cuatro años se había ido <strong>de</strong> casa.<br />

4 El Courtyard of a Hundred Tra<strong>de</strong>s fue creado en 1983. Michel Aussedat, un voluntario <strong>de</strong><br />

tiempo completo con atfd Cuarto Mundo, inició el proyecto con otras personas. Hizo<br />

énfasis en que el Courtyard no se establecía para dar a los niños comida, ropa o medicamentos,<br />

o para compensar su falta <strong>de</strong> vivienda o trabajo. “Nosotros no sólo carecemos <strong>de</strong><br />

recursos, sino que asumir semejante responsabilidad sería arriesgarse a socavar los propios<br />

esfuerzos [<strong>de</strong> los niños] y marginalizarlos aún más, volviéndolos <strong>de</strong>pendientes, algo que<br />

en el fondo <strong>de</strong> su ser en realidad no quisieran”. Por el contrario, el Courtyard es un sitio<br />

<strong>de</strong> reunión don<strong>de</strong> los niños más pobres son siempre bienvenidos. Es un “lugar don<strong>de</strong> los<br />

niños encuentran los medios para enten<strong>de</strong>r sus propias vidas, retomar el control y dirigir<br />

sus esfuerzos hacia proyectos que respeten su familia y su cultura” (Aussedat 1996, 92).<br />

Entre otras activida<strong>de</strong>s, el Courtyard realiza talleres <strong>de</strong> una semana <strong>de</strong> duración con niños<br />

que viven en <strong>la</strong>s calles. Las activida<strong>de</strong>s se ofrecen con <strong>la</strong> ayuda <strong>de</strong> artesanos locales, quienes<br />

son sensibles al <strong>de</strong>stino <strong>de</strong> los pequeños niños y quieren compartir sus conocimientos<br />

con ellos. Más allá <strong>de</strong> aumentar <strong>la</strong>s <strong>de</strong>strezas <strong>de</strong> los jóvenes, los talleres ofrecen un espacio<br />

pacífico para el diálogo que, con frecuencia, termina animando a los más jóvenes a regresar<br />

a sus familias (atd Cuarto Mundo-Burkina Faso 2002).

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!