Trigo_Felipe-Del Frio Al Fuego, Ellas A Bordo
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más da?... Anoche, anoche... Verá usted: estábamos esta mañana sentados allí los tres:<br />
Aurora, Pascual y yo...; de pronto aparece por la puerta esa Rosario del teniente... esa<br />
señora gorda...<br />
-Bola de sebo.<br />
-Bola de sebo, es verdad..., que es compañera de camarote de Aurora.<br />
Creyó ésta, por lo mismo que nunca se reúne con ellas, y por si acaso, que debía decirle<br />
cualquier amabilidad, y la saludó sonriendo: «Muy buenas,<br />
Rosario!... ¡qué calor! ¿ha visto?»... «¡Sí, qué calor!... es ahogarse<br />
-contestó bola de sebo-; bien hizo usted anoche en no bajar hasta el día».<br />
-¡Cuadro!... -«¡Cómo, hasta el día?» -inquirió cuernos en alto el marido, tan pronto como<br />
pasó la otra y viendo turbarse a la señora... Por suerte, impulsivo, más sereno, yo acorrí:<br />
«¡Oh, hasta el día!..., ¡pobre tenienta... se duerme con las gallinas de la jaula!... cuando<br />
bajamos a las once se le debe figurar que sale el sol!»... -Mi observación pareció bastarle al<br />
minotauro, que hizo un «¡ah!» tragando saliva... Mas he aquí que cuando ya, satisfecho de<br />
mi maña, recibía la gratitud de la mirada de Aurora, caigo en la cuenta ¡rediós!... de que mi<br />
noche con ella no había sido anoche, sino anteanoche...; y como no había que soñar que<br />
Pascual hubiese sido el agraciado... ¡zás, un rayo!... bajo, tomo la horquilla, la famosa<br />
horquilla subo otra vez y se la presento: «Perdón, había olvidado que la otra tarde, Aurora,<br />
encontré y guardé esta horquilla de usted»...<br />
-¿Y lo era?<br />
-¡Oh, Andrés!... «Gracias -me replicó tomándola-, precisamente estaba loca de buscarla,<br />
por no poderme poner la compañera»... Le digo a usted que, si como está Pascual delante,<br />
no está Pascual -lo que él dice-, le suelto una trompada. ¡Grandísima... raposa!<br />
-¡Hola!... ¡ella, la del capitán!...<br />
-¡Gran zorro, también... camarote 16... Y mucho aparentar que no le tiene con cuidado que<br />
hablemos... ¡tapándole!... Por supuesto, que yo le largo a ella la trompada, por Pascual,<br />
antes de Manila... Así como así, mejor... ¡dos engañados! ¡ésta tiene para veinte!... Nuestro<br />
viejo capitán no se pensaría que yo iba a llegar a mayores... La torna como yo ¡de<br />
viaje!