Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
DAYLIS URIARTE QUESADA<br />
cionada, pero de cuya producción o concurrencia con seguridad<br />
se percata el sujeto, ocasionándolas conscientemente.<br />
110<br />
El <strong>dolo</strong> directo de segundo grado supone que la intención<br />
o propósito que persigue el sujeto no es precisamente<br />
la realización <strong>del</strong> tipo, sino la consecución de otro objetivo,<br />
pero sabe que a tal acción encaminada a otro fin<br />
va unida necesariamente y con seguridad la realización<br />
de todos los elementos de un tipo <strong>del</strong>ictivo, cuya producción,<br />
por tanto, aunque no le guste, también acepta. 111<br />
Este tipo de <strong>dolo</strong> representa un “querer” la realización<br />
<strong>del</strong> tipo, aun cuando el resultado sea desagradable para<br />
el sujeto. Las consecuencias de la acción que se reconocen<br />
como necesarias son asumidas en su voluntad por el<br />
agente, aun cuando no tenga en absoluto interés en esas<br />
consecuencias. 112 Al respecto, DE TOLEDO Y UBIETO precisa<br />
que en el <strong>dolo</strong> directo de segundo grado el resultado<br />
típico no coincide plenamente con el fin directamente<br />
perseguido por el autor, pero se encuentra tan estrechamente<br />
vinculado al mismo que el logro de éste apa-<br />
110. ROXIN, DP, PG, 1999, pág. 423.<br />
111. LUZóN PEÑA, Curso, s/a, pág. 415. Por su parte Cobo <strong>del</strong> Rosal<br />
expresa que puede decirse que en el <strong>dolo</strong> directo de primer<br />
grado, querido es lo que el autor ha perseguido con su acción,<br />
mientras que en el de segundo grado, querido es lo que el autor<br />
ha aceptado como consecuencia necesaria o inevitable de su<br />
conducta. Mezger, citado por COBO DEL ROSAL / VIVES AN-<br />
TóN, DP, 1987, pág. 447. En este sentido Quintero Olivares manifiesta<br />
que el llamado <strong>dolo</strong> indirecto es referido a la conciencia<br />
y voluntad que el autor tiene, no respecto al resultado principal<br />
de su plan, sino hacia aquellos otros resultados que deben producirse<br />
como medio necesario para alcanzar la meta deseada.<br />
Ver QUINTERO OLIVARES, DP, 1992, pág. 341.<br />
112. ROXIN, DP, PG, 1999, pág. 424.<br />
83