You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
DAYLIS URIARTE QUESADA<br />
Según DÍAZ ARANDA, este criterio no sirve de mucho,<br />
pues quien actúa con culpa consciente también actúa<br />
con indiferencia, y, por otra parte, si el sujeto actúa<br />
sin indiferencia ello no necesariamente conlleva a la exclusión<br />
<strong>del</strong> <strong>dolo</strong>. 148<br />
En el mismo sentido LUZóN expresa que el sentimiento<br />
de indiferencia o de que al sujeto no le importa la posible<br />
producción <strong>del</strong> hecho, puede ser frecuentemente<br />
un indicio de su aceptación, pero nada más. Como criterio<br />
único es inadmisible, pues el sentimiento no puede<br />
sustituir una decisión de voluntad, que es lo que cuenta;<br />
por una parte el sentimiento de indiferencia no es incompatible<br />
con la imprudencia. 149<br />
ROXIN expresa que la teoría de la aprobación en su<br />
versión más estricta resulta cercana a la teoría de la indiferencia,<br />
según la cual hay que apreciar <strong>dolo</strong> eventual<br />
“cuando el sujeto da por buenas o recibe con indiferencia<br />
las consecuencias accesorias negativas meramente posibles,<br />
y sin embargo no cuando considera indeseables esas<br />
consecuencias y tiene por ello la esperanza de que no se<br />
producirán”. Así considera, que hay que darle la razón<br />
a esta doctrina en cuanto que la indiferencia es un indicio<br />
seguro de que el sujeto se ha resignado al resultado y<br />
por tanto ha actuado <strong>dolo</strong>samente. Pero no es acertada en<br />
su apreciación inversa de que la falta de indiferencia, en<br />
el sentido <strong>del</strong> carácter no deseado <strong>del</strong> resultado, excluye<br />
siempre el <strong>dolo</strong>. Pues uno no se puede exonerar de las<br />
consecuencias de su actuación conscientemente incluidas<br />
en el cálculo mediante meras esperanzas en las que<br />
ni uno mismo confía. En esta medida es válida la mis-<br />
148. DÍAZ ARANDA, Manual, 2005, pág. 266.<br />
149. LUZóN PEÑA, Curso, s/a, pág. 424.<br />
99