Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
—¿Quién hereda el título? —pregunté yo.<br />
—Un sobrino <strong>de</strong>l muerto, el capitán Ronald Marsh. Creo que es un<br />
<strong>de</strong>rrochador.<br />
—¿Qué dijo el forense <strong>de</strong> la hora en que tuvo lugar la muerte?<br />
—Tenemos que esperar el resultado <strong>de</strong> la autopsia para saberlo<br />
exactamente. Hay que ver dón<strong>de</strong> está la cena —la manera <strong>de</strong> expresarse <strong>de</strong><br />
Japp distaba mucho <strong>de</strong> ser refinada—. Lo vieron por última vez minutos<br />
<strong>de</strong>spués <strong>de</strong> las nueve, cuando abandonó la mesa. El mayordomo le llevó<br />
whisky y soda a la biblioteca. A las once, cuando el criado se fue a acostar, la<br />
luz estaba apagada; por tanto, <strong>de</strong>bía <strong>de</strong> haber muerto ya, pues no iba a estar<br />
allí a oscuras.<br />
Poirot asintió pensativamente. Poco <strong>de</strong>spués llegábamos a la casa. Nos abrió<br />
la puerta el agraciado mayordomo.<br />
Japp tomó la <strong>de</strong>lantera y entró el primero; Poirot y yo le seguimos. <strong>La</strong> puerta<br />
quedó abierta hacia la izquierda y el criado permaneció en pie junto a la pared<br />
<strong>de</strong> ese mismo lado. Poirot iba a mi <strong>de</strong>recha, y como era más pequeño que yo,<br />
sólo cuando estuvimos en el interior <strong>de</strong>l vestíbulo se fijó en el mayordomo. Oí<br />
una ahogada exclamación a mi espalda, y al volverme rápidamente, sorprendí<br />
al mayordomo mirando a Poirot con un gran espanto reflejado en su rostro.<br />
Apunté el hecho en mi mente, por lo que pudiera ser. Japp entró en el comedor,<br />
que quedaba a la <strong>de</strong>recha <strong>de</strong>l vestíbulo, y llamó al criado.<br />
—Ahora, Alton, <strong>de</strong>seo que se explique usted bien, con la mayor precisión<br />
posible. ¿Eran las diez cuando llegó aquella señora?<br />
—¿<strong>La</strong> esposa <strong>de</strong> lord <strong>Edgware</strong>? Sí, señor.<br />
—¿Cómo la conoció usted? —preguntó Poirot.<br />
—Dio su nombre, señor, a<strong>de</strong>más, había visto otras veces su retrato en los<br />
periódicos, y también la había visto trabajar. Poirot se inclinó.<br />
—¿Cómo iba vestida?<br />
—De negro, señor. Un traje <strong>de</strong> calle negro y un sombrerito negro; llevaba<br />
también un collar <strong>de</strong> perlas y guantes grises. Poirot miró interrogadoramente a<br />
Japp.<br />
—En la fiesta lucía un traje <strong>de</strong> noche <strong>de</strong> tafetán blanco y una capa <strong>de</strong> armiño<br />
—bisbiseó este último, brevemente.<br />
El mayordomo repitió su relato tal como nos lo había ya contado Japp.