Año 10, t. 14, entrega 1 (1903) - Publicaciones Periódicas del Uruguay

Anales de la Universidad 207
mino medio el seis por ciento anual del capital empleado, y combinando
ese dato exacto con los precios de venta del año y los que
conservan las propiedades sometidas á la oferta, se obtendría un
equivalente prudencial. Termina el informe con la presentación de
dos proyectos de ley que contienen: el primero todas las disposiciones
permanentes del impuesto, y el segundo la cuota que debe
pagarse, los plazos para el pago, los avalúos de la propiedad y las
multas. Para complementar los datos del informe, agregaremos que
según los datos suministrados por la contaduría general á la dirección
de estadística, la contribución inmobiliaria produjo desde
1896-97 hasta 1900-901 (cinco años) la cantidad de 9:411,353 pesos,
habiéndose operado en los últimos tiempos algún incremento
mediante el fraccionamiento de las grandes :,onas.
CUOTAS
DIFERENCIALES
Ha suprimido la ley vigente una cláusula de la ley que durante
muchos años estuvo consagrada á promover el desarrollo de la
agricultura en el ejido de los pueblos, mediante el recargo del
25 ^/^^ á las chacras que no tuvieran cultivos ó no sirvieran de
asiento ú un establecimiento fabril. La disposición resultaba completamente
frustránea, según los datos suministrados á la comisión
de hacienda de la cámara de diputados por la oficina recaudadora.
Y así debía suceder naturalmente, dada la absoluta falta de fiscalización
de las declaraciones de los contribuyentes. Si la renta
perteneciera á los departamentos, tendrían las juntas económicoadministrativas
y sus comisiones auxiliares interés en el progreso
de la renta y controlarían el contenido de las planillas. Otra cláusula
se ha tratado de incorporar con el mismo propósito protector
de la agricultura. En un mensaje de 27 de abril de 1891, decía el
poder ejecutivo lo siguiente : « Ferrocarriles que en su origen
cuestan ingentes desembolsos al estado y otros que empiezan á
exigir cuantiosas garantías de interés, han valorizado de una manera
excepcional las tierras adyacentes y cercanas. Los productos
de esas tierras adquieren una segura vía de salida que hace fácil
establecer en ellas industrias antes imposibles. Por razones análogas,
las zonas que bañan el Plata y el Uruguay desde Santa Lucía