Año 10, t. 14, entrega 1 (1903) - Publicaciones Periódicas del Uruguay

Anales de la Universidad 269
guientes cuotas contributivas : sesenta centesimos mensuales, los
edificios urbanos que produzcan más de ochenta pesos mensuales
de alquiler y todas las casas de comercio y talleres industriales
que paguen una patente de ochenta pesos arriba; cuarenta centesimos,
los edificios cuyo alquiler sea de cuarenta pesos y las casas
de comercio y talleres industriales que paguen patente de treinta pesos;
veinticinco centesimos las casas de veinticinco pesos de alquiler
y los establecimientos gravados con patente de veinte pesos; él pago
de las cuotas corresponde al ocupante de la finca, propietario ó
inquilino, exceptuándose las casas de inquilinato ó conventillos, gravados
con cuarenta centesimos, á cargo del propietario del edificio;
los establecimientos rurales compuestos de una ó más suertes de estancia,
cuarenta centesimos mensuales pagaderos anualmente; los
establecimientos rurales del valor de cuatro mil pesos, ,30 centesimos
mensuales en la misma forma; la recaudación se hará en la
capital por los recaudadores de alumbrado y sereno y en los departamentos
por los recaudadores de la contribución directa. Un
segundo decreto ley de 9 de octubre del mismo año amplió el impuesto
en esta forma: las casas cuyo alquiler mensual sea menor
de veinticinco pesos y mayor de diez pesos en la capital y de seis
pesos fuera de ella, pagarán la cuota de veinte centesimos al mes;
en las ciudades, villas y pueblos do campaña cobrarán el impuesto
los recaudadores de alumbrado y sereno; las cuotas sobre las propiedadades
rurales se recaudarán en Montevideo por la oficina de
contribución directa.
La patente de perros, págase en esta forma, según la ley de 9
de junio de 188,5: en las ciudades, villas y pueblos de toda la república,
dos pesos por cada animal, incluyéndose el precio de la chapa
y el boleto respectivo; los establecimientos de pastoreo, una
sola patente de dos pesos; las cimeras y quintas, una sola patente
de un peso. La ley de 30 de octubre de 1S9L adjudicó á los revisadores
el importe de las multas. Justificando esta medida, dijo la
comisión de hacienda de la cámara de diputados, que en el ejercicio
1885-1886, los revásadores tenían ese estímulo, que después fué
suprimido, dando ello lugar á que el producto del impuesto en el
departamento de Montevideo, declinara fuertemente en esta forma;
ejercicio 1885-1886, pesos 8,490; ejercicio 1886-1887, pesos 2,520