11.05.2013 Views

Tempestades de acero

Tempestades de acero

Tempestades de acero

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Ernst Jünger <strong>Tempesta<strong>de</strong>s</strong> <strong>de</strong> <strong>acero</strong><br />

caqui. En ese mismo instante irrumpió el adversario, en grupos compactos, en el lado izquierdo <strong>de</strong> la<br />

posición. Lo que estaba ocurriendo al otro lado <strong>de</strong>l talud <strong>de</strong>lantero era algo que no resultaba visible, a<br />

causa <strong>de</strong> la profundidad <strong>de</strong>l camino.<br />

En esta situación <strong>de</strong>sesperada, los moradores <strong>de</strong>l abrigo que estaban más cerca <strong>de</strong> su entrada se<br />

lanzaron fuera, sobre todo el sargento Sievers, con una ametralladora aún intacta y sus sirvientes. En unos<br />

segundos quedó emplazada el arma en el piso <strong>de</strong>l camino y enfilada hacia el adversario <strong>de</strong> la <strong>de</strong>recha.<br />

Pero en el momento en que el apuntador tenía ya la mano en el cargador y el <strong>de</strong>do en el gatillo, por el<br />

talud <strong>de</strong>lantero cayeron rodando varias granadas <strong>de</strong> mano inglesas. Los dos sirvientes <strong>de</strong> la ametralladora<br />

se <strong>de</strong>splomaron junto a su arma sin haber logrado que <strong>de</strong>l cañón <strong>de</strong> ésta saliese una sola bala. Todos los<br />

<strong>de</strong>más hombres que salieron <strong>de</strong>l abrigo fueron recibidos con tiros <strong>de</strong> fusil, <strong>de</strong> manera que en pocos<br />

instantes hubo alre<strong>de</strong>dor <strong>de</strong> cada una <strong>de</strong> las dos entradas una ancha corona <strong>de</strong> caídos.<br />

También a Schmidt lo <strong>de</strong>rribó al suelo la primera salva <strong>de</strong> granadas <strong>de</strong> mano. Un casco <strong>de</strong> metralla le<br />

dio en la cabeza, otros le arrancaron tres <strong>de</strong>dos. Quedó tendido, con la cabeza apretada contra la tierra,<br />

cerca <strong>de</strong>l abrigo; éste siguió atrayendo hacia sí, durante bastante tiempo, un intenso fuego <strong>de</strong> fusilería y <strong>de</strong><br />

granadas <strong>de</strong> mano.<br />

Por fin se hizo el silencio; los ingleses se apo<strong>de</strong>raron también <strong>de</strong> esta parte <strong>de</strong> la posición. Schmidt, tal<br />

vez el único hombre vivo que quedaba en el camino en hondonada, oyó pasos anunciadores <strong>de</strong> que los<br />

atacantes se aproximaban. Inmediatamente <strong>de</strong>spués resonaron a ras <strong>de</strong>l suelo <strong>de</strong>tonaciones <strong>de</strong> tiros <strong>de</strong><br />

fusil y explosiones <strong>de</strong> cargas <strong>de</strong> voladura y bombas <strong>de</strong> gas, con las cuales limpiaban el abrigo. Pese a ello,<br />

aún salieron a rastras <strong>de</strong> allí, hacia el atar<strong>de</strong>cer, algunos supervivientes; se habían ocultado en un rincón<br />

protegido. De ellos se compusieron sin duda los pequeños grupos <strong>de</strong> prisioneros que cayeron en manos <strong>de</strong><br />

las tropas <strong>de</strong> asalto inglesas. Camilleros ingleses los recogieron y los llevaron a la retaguardia.<br />

Poco más tar<strong>de</strong> cayó también Combles, una vez que quedó cerrado el cerco <strong>de</strong> la Granja <strong>de</strong><br />

Frémicourt. Sus últimos <strong>de</strong>fensores, que durante el bombar<strong>de</strong>o se habían refugiado en las catacumbas,<br />

fueron abatidos en la lucha por las ruinas <strong>de</strong> la iglesia.<br />

Luego se hizo el silencio en esta región, hasta que la reconquistamos en la primavera <strong>de</strong> 1918.<br />

66

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!