12.05.2013 Views

Descarga - Concilio Arca de Salvación

Descarga - Concilio Arca de Salvación

Descarga - Concilio Arca de Salvación

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

por medio <strong>de</strong>l Espíritu Santo. Pero, aparte <strong>de</strong> esto, hay que tener<br />

en cuenta que el verbo hebreo laqaj tiene el doble sentido<br />

<strong>de</strong> «recibir» para «dar» (v. Gn. 18:5; 27:13; 42:16; Ex. 27:20;<br />

Lv. 24:2; 2 R. 2:20). Es también <strong>de</strong> notar, como ya hemos apuntado,<br />

que, en el salmo, dice: «recibiste dones en el hombre»<br />

(singular y con artículo; hebr. ba'adam); por lo que podríamos<br />

traducir: «recibiste dones en tu naturaleza humana»; esto es,<br />

como «el Hijo <strong>de</strong>l Hombre» (comp. con Mt. 28:18; Jn. 13:3); fue<br />

así como «dio dones a los hombres».<br />

(c) Con diferencia <strong>de</strong> número gramatical.<br />

Mt. 4:7. «No tentarás al Señor tu Dios.» En Dt. 6:16, dice:<br />

«No tentaréis a Yahvveh vuestro Dios.» Siendo un mandamiento<br />

general, bien pudo el Señor aplicarlo en singular al Tentador.<br />

Ro. 4:7. «Bienaventurados aquellos cuyas iniquida<strong>de</strong>s han<br />

sido perdonadas.» En el Sal. 32:1, la frase está en singular: «Bienaventurado<br />

aquel a quien es perdonada su transgresión, y cubierto<br />

su pecado.» Pero no es una cita directa, pues es introducida<br />

con las palabras: «Como también David habla <strong>de</strong> la bienaventuranza<br />

<strong>de</strong>l hombre a quien Dios atribuye justicia sin obras,<br />

diciendo: Bienaventurados aquellos cuyas iniquida<strong>de</strong>s han sido<br />

perdonadas, y cuyos pecados han sido cubiertos. Dichoso el varón<br />

a quien el Señor no imputará ningún pecado.» Pero en el<br />

hebreo, el vocablo «hombre» (hebr. 'adam) no aparece hasta el<br />

v. 2, ya que el v. 1 dice literalmente: «Oh, las bendiciones (¡así<br />

comienza el Sal. 1:1!) <strong>de</strong>l perdonado <strong>de</strong> transgresión, <strong>de</strong>l cubierto<br />

(en cuanto al) pecado.» Este singular, pues, pue<strong>de</strong> usarse<br />

colectivamente <strong>de</strong> un pueblo perdonado, siendo así extendido<br />

por el Espíritu Santo conforme al sentido <strong>de</strong>l salmo.<br />

Ro. 10:15. «... ¡Cuan hermosos son los pies <strong>de</strong> los que evangelizan<br />

las cosas buenas!» (lit.). En Is. 52:7, leemos: «... los pies<br />

<strong>de</strong>l que», don<strong>de</strong> el singular está, por sinécdoque, en lugar <strong>de</strong>l<br />

plural, así como los «pies» están, por la misma figura, en lugar<br />

<strong>de</strong> la «persona».<br />

666

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!