07.05.2013 Views

Josefinos.qxd:00 Libro Sanidad.qxd - Asociación Cultural Los Sitios ...

Josefinos.qxd:00 Libro Sanidad.qxd - Asociación Cultural Los Sitios ...

Josefinos.qxd:00 Libro Sanidad.qxd - Asociación Cultural Los Sitios ...

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

198<br />

Enrique Asín Cormán<br />

“el Pocho”. El 4º toro fue rejoneado por Juan Antonio García, en compañía de un<br />

mono que citaba y encelaba al toro para, al venirse éste, subirse al caballo y así el<br />

caballero pudiera clavar sus rejoncillos. Y como fin de fiesta, el espectacular y asombroso<br />

número de correr un jabalí salvaje acosado por los alanos perros de presa para,<br />

una vez hecha ésta, ser muerto el puerco a estoque por el extravagante Cristóbal<br />

Díaz. ¡Todo un poema de corrida de Navidad!. La afluencia de público fue ínfima,<br />

como era de esperar en tan señalado día y en las circunstancias reinantes, y el resultado<br />

económico fue ruinoso produciéndose un déficit de 6.143,14 reales. Como consecuencia<br />

de esto último y tratándose del marrullero “Sentimientos”, hubo reclamaciones<br />

de los propios toreros actuantes que exigían la totalidad de los estipendios<br />

tratados y que llegaron a acudir al arbitrio del Corregidor de la Villa. <strong>Los</strong> picadores<br />

Juan Gallego y Antonio Rueda le reclamaban 25 doblones cada uno a lo que se avino<br />

el matador ante la mediación del señor Corregidor. También acudió a reclamar, esta<br />

vez ante el juez, el rejoneador del mono, Cayetano García, los 640 reales que, según<br />

él, en presencia de ilustres testigos, le apalabró por su actuación “Sentimientos”. Por<br />

buenas componendas y porque el feísimo y marrullero Núñez debió saber confundir<br />

al juez, se arregló la deuda en 2<strong>00</strong> reales que el matador no pagó alegando pérdidas<br />

en la tan estrambótica corrida.<br />

Iba a asistir a este festejo Bonaparte mas hubo cortésmente de excusarse ante su<br />

castizo y torero amigo, al que admiraba muy sinceramente, aduciendo asuntos de<br />

Estado. Razón tenía José I. La víspera, día de Nochebuena, en una entrevista larga<br />

y profunda con el embajador de Francia general Ornano entregó a éste una especie<br />

de ultimátum exponiendo una vez más sus quejas al Emperador:<br />

Estoy reducido a la más terrible miseria; no veo en derredor mío sino desgraciados;<br />

mis principales funcionarios están reducidos a no tener fuego en su<br />

casa. Todo lo he dado, todo lo he empeñado; yo mismo estoy fuera de la miseria.<br />

Permítame V. M. volver a Francia, o haga V. M. I. pagarme exactamente<br />

el millón mensual que me ha prometido a contar desde 1º de julio...<br />

Así se expresaba José I en sus lamentos y peticiones, nunca escuchados ni atendidos<br />

éstos por el Sire, sin olvidar la reticente y reiterada renuncia de la corona y su<br />

deseo de vivir tranquilamente en Mortefontaine. ¡Estaba aquel día como para ir a<br />

los toros...!.<br />

Dos festejos de novillos se habían dado en cumplimiento de la contrata de la<br />

plaza, los días 24 de noviembre y 1 de diciembre de 1811. En la primera hubo dos<br />

toros sin embolar para los banderilleros y dos toros de muerte, de Bañuelos, picados<br />

por Juan Gallego y Antonio Herrera, y estoqueados por Cándido. En plaza par-

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!