Josefinos.qxd:00 Libro Sanidad.qxd - Asociación Cultural Los Sitios ...
Josefinos.qxd:00 Libro Sanidad.qxd - Asociación Cultural Los Sitios ...
Josefinos.qxd:00 Libro Sanidad.qxd - Asociación Cultural Los Sitios ...
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
<strong>Los</strong> toros josefinos<br />
trada de Madrid, tras una descripción de los accesos a la Villa y Corte y un sabroso<br />
análisis del carácter de sus habitantes, hace una mención a las corridas de toros:<br />
... La numerosa concurrencia que cubre las gradas y los palcos presenta el<br />
más brillante golpe de vista; allí es donde el viajero observador puede estudiar<br />
las costumbres del pueblo, y por las sales y agudezas con que los mismos<br />
concurrentes alegran estas funciones, venir en conocimiento de la viveza e<br />
ingenio del carácter nacional...<br />
10.- Suerte típica del toreo portugués es la de los pegadores o mozos de forçado<br />
consistente en una especie de mancuerno, o del mancornar, es decir agarrar al toro<br />
por los cuernos con las manos para sujetarlo y dominarlo con algún fin o, simplemente,<br />
como acto de destreza, valor y ejercicio físico. La pega, como así se llama<br />
a esta acción, se realiza con una cuadrilla de mozos -la mocedad, evidentemente,<br />
es fundamental-, cuyo jefe, secundado por los demás, es quien mancuerna al toro.<br />
Hay que aclarar que, técnicamente, hay muchos matices diferenciales entre pega y<br />
mancuerno que no han lugar aquí. Varias son las formas y estilos de realizar las<br />
pegas según sean de cara, de costas, de rabo o volta y de cernelha, al decir del erudito<br />
portugués Antonio Rodovalho Duro. Su origen es, parece ser, campero donde<br />
era preciso reducir a las reses para las distintas operaciones ganaderas; y en la<br />
plaza, al decir de algunos tratadistas, bien pudiera ser una suerte, además de gallarda<br />
y valerosa, para llevar a los toros una vez rejoneados por los caballeros, ya que<br />
en Portugal no hay suerte de matar, a los corrales.<br />
11.- Puede parecer chocante y hasta increíble pero, efectivamente, ha habido<br />
corridas de toros en Italia; como las hubo -y en alguno de ellos las sigue habiendoen<br />
ocho países de Europa -Inglaterra incluída-, en más de veinte de las tres<br />
Américas, en nueve de Africa, y en otros tan exóticos como Kuwait. Líbano,<br />
Filipinas, Indonesia, Las Azores y Macao. ¡Por algo será...!<br />
El caso de Italia es el único que ahora interesa aquí por cuanto es allí donde surgieron<br />
las prohibiciones pontificias que tan a maltraer llevaron a nuestro católico<br />
rey Felipe II. Y es que por Plinio el Viejo, el naturalista Cayo Plinio Secundo (23-<br />
79 d. J. C.), sabemos que fue Julio César el primero que autorizó las fiestas de toros<br />
influenciado e impresionado por las que vio en España y sur de Francia de donde<br />
las importó. Y aun es más, pues parece ser que fue en España donde César aprendió<br />
la destreza de su lidia. Sin embargo no es sino hasta el siglo XII cuando aparece<br />
fehacientemente documentado el primer espectáculo taurino italiano. En el XIII<br />
estos festejos se celebraban en el romano Campo di Agone (hoy Piazza Navona) y<br />
en el XVI en Piazza Fornese, hasta que nuestro querido pontífice Pío V las prohi-<br />
235