informe de la decimoctava reunion del comite cientifico - CCAMLR

4.105 El enfoque básico para ajustar el GLM fue el mismo del año pasado. Los detalles de la
metodología figuran en SC-CAMLR-XIV, anexo 5, apéndice G. Sin embargo, se hicieron
cambios en la transformación de los datos CPUE y en el tipo de análisis GLM utilizado. Estos
cambios se hicieron porque la distribución de los residuales producidos por el modelo GLM que
fue ajustado el año pasado tenía características no satisfactorias (ver en la figura 6 el gráfico QQ
de los residuales del modelo ajustado al CPUE en kg/anzuelo). Este año, se utilizó una
transformación de raíz cuadrada y se llevó a cabo un análisis GLM más fiable. Para el análisis
de CPUE en kg/anzuelo, el modelo utilizado fue GLM(cpue ~ season + month + area +
nationality + bait + poly(depth, 2), family = robust(quasi(link))), mientras que para el CPUE
expresado en número por anzuelo, el modelo utilizado fue GLM(cpue ~ season + month + area
+ nationality + bait + poly(depth, 4), family = robust(quasi(link))). Se obtuvo de esta manera
una distribución mucho más satisfactoria de residuales (ver en la figura 7 el ajuste de CPUE en
kg/anzuelo).
4.106 Las variables de nacionalidad, temporada invernal, mes, área, profundidad y tipo de
cebo demostraron ser fuentes muy significativas estadísticamente de la variabilidad de CPUE de
lance por lance, en kg/anzuelo y números/anzuelo. Estas variables de predicción fueron
también sumamente importante en los análisis previos del grupo de trabajo.
4.107 La serie cronológica normalizada de datos CPUE del invierno en kg/anzuelo se graficó
en la figura 8 y se presenta en la tabla 32. La normalización se realizó con respecto a barcos
chilenos que pescaron en el sector este de Georgia del Sur en marzo a una profundidad de
1 152 m utilizando dracos como cebo. Esta serie cronológica ha sido ajustada también para
considerar los lances con captura cero. Tal como en el año pasado, el ajuste se hizo mediante la
estimación de la proporción de capturas distintas de cero en cada temporada de pesca y
multiplicando los CPUE normalizados, previstos por el GLM, por estas proporciones. La
tabla 33 muestra la proporción de las capturas distintas de cero.
4.108 La serie cronológica de los CPUE de invierno normalizados en número/anzuelo se
graficó en la figura 9 y se presenta en la tabla 34. Se usó la misma normalización utilizada para
el CPUE en kg/anzuelo, y la serie cronológica también ha sido ajustada para considerar los
lances con captura cero.
4.109 Las tasas de captura ajustadas y normalizadas disminuyeron entre la temporada de
1993/94 y 1997/98, pero aumentaron nuevamente en la temporada de 1998/99. Sin embargo, la
magnitud del aumento del CPUE normalizado en la temporada más reciente fue bastante
diferente para los análisis de kg/anzuelo y números/anzuelo. Hubo un aumento pequeño del
CPUE normalizado en kg/anzuelo, pero un aumento substancial del CPUE en números/anzuelo.
La diferencia observada entre los CPUE nominal y normalizados en 1998/99 fue mucho mayor
a la observada en temporadas previas.
4.110 Las posibles causas de estos resultados fueron examinadas estudiando las distribuciones
de las profundidades explotadas en la Subárea 48.3 por área y temporada. Esto indicó
claramente que en las dos últimas temporadas, y especialmente en 1998/99, hubo un aumento
considerable del número de palangres calados en aguas poco profundas (300 a 700 m),
particularmente al norte de las rocas Cormorán. La figura 10 muestra los histogramas de las
profundidades explotadas por temporada, y las figuras 11 y 12 muestran las profundidades
explotadas por área alrededor de Georgia del Sur para las temporadas 1997/98 y 1998/99.
Cuando se agrupan las distribuciones según los distintos niveles de CPUE (en peso o número),
queda claro que la pesca en aguas poco profundas contribuyó en gran parte al CPUE nominal
global en peso y en número (ver las figuras 13 y 14).
4.111 El grupo de trabajo examinó a continuación el peso promedio de los peces capturados en
el invierno, calculados simplemente como el promedio del peso promedio por lance, sin
ponderación por la captura. Para la Subárea 48.3 en su totalidad, hubo una leve disminución en
las últimas dos temporadas (figura 15). La disminución del peso promedio en dichas
temporadas fue mucho más obvia en las rocas Cormorán (figura 16), y cuando se volvió a
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