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ENFERMEDADES NEONATALES DE LOS CORDEROS PRODUCIDAS POR BACTERIAS 121<br />
ganismos (colis clostridios) un sistema de equilibrio<br />
inestable que especialmente en la convivencia de animales<br />
de diversas especies se altera, con intensa proliferación<br />
de ciertos gérmenes o localización de los<br />
mismos en lugares no adecuados del organismo.<br />
El microbismo ambiental de los apriscos y/o naves<br />
tiene su expresión en el fenómeno denominado «fatiga<br />
estabular», que puede ser modificado con una desinfección<br />
profunda y un descanso durante un tiempo<br />
determinado.<br />
Patógenos facultativos o patógenos secundarios<br />
Una de las principales características del microbismo,<br />
en la explotación intensiva, consiste en el cambio<br />
de aspecto de la flora microbiana clásica, con predominio<br />
de gérmenes patógenos secundarios o facultativos,<br />
y la alerta de los gérmenes patógenos primitivos.<br />
Estos últimos suelen encontrarse controlados por las.<br />
medidas profilácticas, higiénicas e incluso terapéuticas.<br />
Permanecen en letargo y constituyen una amenaza<br />
solapada, latente y permanente de infección. Basta<br />
con que las antedichas medidas no sean respetadas<br />
para que las infecciones primitivas se recuperen y dominen<br />
de nuevo la patología. Los agentes de las infecciones<br />
secundarias, que no manifiestan su poder patógeno<br />
más que a consecuencia de un debilitamiento<br />
del terreno, tienen el campo libre, porque, por un lado,<br />
las grandes enfermedades se encuentran limitadas<br />
y, por otro, la receptividad de los animales se<br />
acrecienta con las condiciones de la explotación intensiva.<br />
De esta forma es como la flora saprofítica,<br />
que se encuentra en todas partes, constituye una permanente<br />
amenaza de infección y amenaza de invasión<br />
para el terreno.<br />
Los agentes de las infeciones secundarias tienen un<br />
poder patógeno que varía en función del estado de resistencia<br />
del terreno (organismo animal); cuanto más<br />
sensible sea el terreno (animales jóvenes) mayores<br />
caracteres de gravedad poseerá la enfermedad.<br />
Las variaciones se deben igualmente al aporte incesante<br />
de nuevos gérmenes por el hecho de la introducción<br />
de animales nuevos y extraños en la explotación.<br />
El poder patógeno de ciertos gérmenes parece ser<br />
desencadenado o exaltado por influencia de otra especie<br />
bacteriana, y cuanto más contaminado está el<br />
medio, mayores posibilidades existen para que se realicen<br />
tales asociaciones.<br />
Los gérmenes que se consideran patógenos facultativos<br />
son: Pasteurellas, Chlamydias y clostridium,<br />
principalmente, así como el E. coli para el síndrome<br />
septicemia.<br />
El hombre hace desaparecer, total o parcialmente,<br />
la virulencia de los microorganismos empleando medios<br />
físicos (calor), químicos (desinfectantes) o biológicos<br />
(pases sucesivos por animales, embriones de pollo<br />
o células de diferentes órganos del cuerpo animal), y<br />
obtiene las bacterinas (gérmenes muertos) y las vacunas<br />
(virulencia atenuada), que utilizan para el control<br />
de las enfermedades. Ambos conceptos se simplifican<br />
en uno sólo y es el de vacunas.<br />
Patógenos<br />
estrictos<br />
Se conoce como bacterias patógenas estrictas a todas<br />
aquellas que cuando so ponen en contacto con un<br />
organismo vivo, animal o vegetal, si éslo no está inmunizado<br />
contra él, le producen la. enfermedad.<br />
Las propiedades más importantes de los patógenos<br />
estrictos vienen dadas por la capacidad de:<br />
— Sobrevivir y multiplicarse en el organismo.<br />
— Penetrar en el Hospedador.<br />
— Resistir la fagocitosis.<br />
— Resistir los efectos bactericidas del suero.<br />
— Producir toxinas.<br />
A estas propiedades hay que añadir el número de<br />
gérmenes invasores en el momento de la infección.<br />
Los gérmenes patógenos productores de enfermedades<br />
neonatales en los corderos, según POPOFF y<br />
TAINTURIER (1987), son: Pasteurella, Slreptococcus,<br />
Corynebacterium, Haemophilus, Fusobacterium, Campilobacter,<br />
E. coli, Klebsiella, Yersinia, Aeromonas.<br />
En el año 1986 se encontraron, en los diferentes<br />
diagnósticos efectuados en corderos de menos de<br />
veinte días de edad, en el INIA, los siguientes agentes:<br />
— Clamidias: 38%.<br />
— Clostridios: 37%.<br />
— Criptosporidios: 15%.<br />
— Deficiencias nutritivas (enfermedad del músculo<br />
blanco): 10%.<br />
— Necrobacilos: 8%.<br />
— Pasterelas: 5%.<br />
— Colis: 2%.<br />
En el año 1987 y 1988 ha aumentado el porcentaje<br />
de criptosporidios y de colis en detrimento de los clostridios.<br />
También se ha aislado el bacilo de la PTB, pero no<br />
le consideramos responsable del proceso patológico<br />
que presentaba el animal afectado.<br />
La mayoría de estos agentes son productores de<br />
diarrea y muerte, encontrándose varios de ellos asociados.<br />
PARTICULARIDADES DE LAS ENFERMEDADES<br />
NEONATALES DE LOS CORDEROS<br />
Vía de contagio<br />
La principal vía de contagio o puerta de entrada de<br />
los agentes infecciosos está representada por el cordón<br />
umbilical. Cuando aún no se ha secado, constituye<br />
una barrera muy fácil de franquear para los diversos<br />
microorganismos presentes en el medio exterior,<br />
con el cual está directamente en contacto. La infec-