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int encuentro 24 A - cubaencuentro.com - Cuba Encuentro

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Jorge Núñez Vega <strong>int</strong>egrarían un entorno parecido a aquel grupo del porfiriato autodenominado«los científicos», al que podía recurrirse en busca de asesoría o que podían<strong>int</strong>egrarse a la burocrácia <strong>com</strong>o funcionarios 14 . El dictador aparecía antemuchos involucrados en su régimen <strong>com</strong>o una alternativa (acaso la última) almodelo de conducción política de una sociedad en vías de des<strong>int</strong>egración, locual justifica también en alguna medida el culto rendido a su persona quemencionamos antes.Generalmente, la referencia a la proyección machadista hacia los <strong>int</strong>electualessolo pasa por la <strong>com</strong>pra de periódicos y la represión, y esto es inexacto.El poder es siempre poder y la coerción de la opinión estuvo presente hastaen el débil gobierno de Zayas, <strong>com</strong>o evidencia la nota al pie 15 .Machado aplicaba un criterio práctico: existían los <strong>int</strong>electuales útiles parael progreso y los «vagabundos <strong>int</strong>electuales», léase, de la oposición que lo criticabay ante la cual afirmaba con desprecio su condición de caudillo —«mipolítica está sellada con el machete, en los campos de la revolución redentora;no haciendo literatura mohosa, ni versos hiperbólicos y sentimentales aEspaña» 16 —. La primera de las variantes se objetivó [1] en cierto <strong>int</strong>erés en laInstrucción Pública y en la divulgación de la cultura oficial y [2] en el fomentode estudios sociológicos sobre los factores que podían distorsionar la estabilidadde las instituciones tradicionales, para lo cual <strong>int</strong>entó (sin éxito) centralizarla investigación y colocarla bajo orientación gubernamental. Bajo Machadose creó la Academia de Ciencias Sociales (1928) con esa finalidad concreta. Esun objetivo que reaparece luego con Batista, quien promocionó otro organismoparecido años después: el Instituto de Ciencias Políticas y Sociales.Las personas que se adhirieron al régimen provenían de las más diversastendencias políticas y ocupaban las posiciones más disímiles en el campo<strong>int</strong>electual cubano. De ahí que la «machadokrazia» <strong>int</strong>electual fuera un sistemade agregados, una suma de elementos sin una idea <strong>com</strong>partida. Utilizaréalgunos casos, los más atractivos quizás, ordenados según las funciones quecumplieron.60<strong>encuentro</strong>14 Sobre los científicos dice David Brading: «Cansados de las abstracciones jacobinas de sus antepasados,se convirtieron al positivismo <strong>com</strong>tiano y aclamaron a Porfirio Díaz <strong>com</strong>o el fundadorde la etapa industrial y científica de la historia de México. Los científicos «convencidos de que laorganización económica impone irresistiblemente la organización política y para modificar éstaes indispensable transformar aquélla», aceptaron la dictadura porfiriana <strong>com</strong>o un instrumentoinevitable para el progreso material». Cfr. su <strong>int</strong>roducción a la <strong>com</strong>pilación hecha por él mismoCaudillos y campesinos en la Revolución mexicana, Mexico, f.c.e., 1991, p. 15.15 «Notas de la dirección or la libertad de prensa.- En representación de Social, nuestro directorliterario [Emilio Roig] asistió el mes pasado a las reuniones que celebraron los directores de diariosy revistas de La Habana y a la visita que los mismos hicieron al Secretario de Gobernacióncon el objeto de recabar de este funcionario se retirase las disposiciones que había dictado y coartabanla libertad de prensa. Satisfactorios resultados tuvieron esas gestiones. Sólo falta (...) quepor una ley de la República queden perfectamente aclarados y garantizados los derechos quereconoce nuestra constitución referentes a las libertades de pensamiento y palabra hablada oescrita». Social, La Habana, junio, 1923, p. 6.16 Quesada y Miranda, Op. cit., p. 102.

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