12.04.2018 Views

Comportamiento-Organizacional-Idalberto-Chiavenato-McGrawhill-2da-Edicion

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

CAPÍTULO 14 • Cambio y desarrollo organizacional 427<br />

9. Para cambiar a la empresa usted debe cambiar primero.<br />

En cualquier intento de transformación, la primera<br />

persona que debe cambiar es usted, así que comience<br />

a trabajar como agente de cambio, porque quienes<br />

están encima y debajo de usted lo analizarán y criticarán<br />

más y lo juzgarán con estándares más estrictos. El<br />

secreto está en desarrollar capacidades y técnicas que<br />

cambien de inmediato su forma de trabajar.<br />

10. Aun cuando la empresa no cambie, usted lo hará. El<br />

cambio y el crecimiento van de la mano. Ninguna persona<br />

puede crecer sin hacer cambios. Las empresas<br />

saben que uno de los recursos más escasos hoy día<br />

son personas que puedan ayudarlas a atravesar periodos<br />

turbulentos de cambio.<br />

Al fin de cuentas, concluye Fishman, es cuestión de<br />

renovarse o morir. Ésta podría ser la undécima ley del cambio.<br />

●<br />

la fuente de la resistencia es la falta de comunicación<br />

o la información precaria, deberán aclararse todas las<br />

dudas para acabar con la resistencia. Cada gerente<br />

debe preparar una presentación audiovisual que explique<br />

en varias sesiones los cambios y sus razones a<br />

los grupos involucrados. Debe dedicarse tiempo para<br />

debatir y responder dudas. Estas presentaciones<br />

deben repetirse durante meses ante varios grupos. La<br />

confianza mutua y la credibilidad ayudan a eliminar<br />

la resistencia al cambio.<br />

Las empresas que tienen éxito en sus programas<br />

de cambio son aquellas que comunican claramente<br />

dos hechos básicos a su personal: el primero es la<br />

posición que la organización ha logrado en el mercado<br />

con sus actuales métodos y procesos de trabajo,<br />

y el riesgo de enfrentar pérdidas y perjuicios si se<br />

mantiene en la posición actual. El segundo punto es<br />

adónde se pretende llegar con el cambio y cuál es el<br />

papel de las personas para que la organización alcance<br />

ese objetivo cuanto antes y de la mejor manera<br />

posible.<br />

No obstante, la comunicación no siempre basta<br />

para explicar un programa de cambios. La instrucción<br />

es indispensable, e implica que toda la organización,<br />

desde la alta gerencia hasta las líneas de producción,<br />

estén en perfecta sintonía con las mismas<br />

ideas de cambio e innovación. Toda la orquesta debe<br />

tocar al mismo ritmo y sin desafinar. La convergencia<br />

de objetivos es fundamental. Todas las personas<br />

deben saber perfectamente qué hacer y cómo, dónde<br />

y cuándo hacerlo. De esta forma el cambio tendrá éxito.<br />

Sin embargo, para ello, no debe haber disonancia,<br />

discrepancia ni ignorancia alguna, pues el hilo siempre<br />

revienta por lo más delgado.<br />

Cuando la resistencia al cambio se basa en información<br />

inadecuada o análisis inexactos, el programa<br />

de comunicación es lo más indicado. Éste exige<br />

que haya una buena relación entre los iniciadores del<br />

cambio y los que se resisten a él.<br />

2. Participación e involucramiento. Las personas deben<br />

estar inmersas en el proceso de cambio antes de que<br />

éste ocurra. Una persona difícilmente se resistirá a un<br />

cambio si ha participado en las decisiones. Aquellos<br />

que emprenden el cambio deben involucrar a quienes<br />

se resisten en alguna parte del proyecto y de su<br />

aplicación, y escuchar con atención las sugerencias.<br />

La participación en el esfuerzo de cambio neutraliza<br />

la resistencia. Las personas involucradas empiezan<br />

a participar intensamente y dejan de ser sujetos<br />

pasivos. Esto representa un profundo cambio en la<br />

filosofía y la cultura organizacionales, pues la participación<br />

y la implicación emocional de las personas<br />

reflejan una posición eminentemente democrática.<br />

Si los iniciadores del cambio sienten que no poseen<br />

toda la información necesaria para el proyecto y su<br />

aplicación, o necesitan del compromiso incondicional<br />

de otras personas para lograrlo, la participación y<br />

el involucramiento son sumamente aconsejables. La<br />

participación busca el compromiso de las personas,<br />

no sólo su anuencia. El compromiso personal e íntimo<br />

de todos los involucrados es fundamental para<br />

que el cambio tenga éxito. Sin embargo, el programa

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!