12.05.2013 Views

Descargar - Alcaldia Municipal de San Miguel

Descargar - Alcaldia Municipal de San Miguel

Descargar - Alcaldia Municipal de San Miguel

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

NORA ROBERTS ÁNGELES CAÍDOS<br />

—Deena no era <strong>de</strong> las que compartían, no sé si me entien<strong>de</strong>s. Alar<strong>de</strong>ar, <strong>de</strong>s<strong>de</strong><br />

luego, pero a este se lo guardaba para ella. No era un motero.<br />

—¿Ah, no?<br />

—Dijo que había llegado el momento <strong>de</strong> pescar a uno que tuviese un buen<br />

trabajo y supiese más <strong>de</strong> la vida que lo que se veía <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el asiento <strong>de</strong> una Harley. De<br />

todos modos, tuvieron una bronca, como te he dicho. Luego ella se largó. Hacia<br />

pastos más ver<strong>de</strong>s supongo.<br />

—Creo que tienes razón.<br />

Brody no dijo nada hasta que estuvieron <strong>de</strong> nuevo en el coche.<br />

—He <strong>de</strong>scubierto un nuevo aspecto <strong>de</strong> tu carácter, Flaca. Pue<strong>de</strong>s sentarte en un<br />

topless y mentir con absoluta verosimilitud.<br />

—Parecía el camino más directo. Decir algo como «Vi que asesinaban a Deena<br />

Black hace unas semanas, pero casi nadie me cree», no me convencía. Aunque no sé<br />

si ha servido <strong>de</strong> algo.<br />

—Des<strong>de</strong> luego que sí. Toda la información que tenemos apunta a su<br />

<strong>de</strong>saparición, que coinci<strong>de</strong> con lo que viste junto al río. Mantenía una relación con un<br />

hombre que no quería que ella soltase su nombre por ahí ni que lo viesen con ella. A<br />

pesar <strong>de</strong> todo, estaba lo bastante enganchado para gastarse dinero en ella. Las joyas<br />

significan mucho para las mujeres, ¿no es así?<br />

—Des<strong>de</strong> luego.<br />

—Así que le compró una baratija, por lo que <strong>de</strong>duzco que no solo iba con ella<br />

para echar un polvo <strong>de</strong> vez en cuando, al menos al principio. Rompieron, y ella no<br />

quiso <strong>de</strong>jarlo así. Ella empujó; él empujó también, y lo hizo <strong>de</strong>masiado fuerte.<br />

—Pue<strong>de</strong> que fuese en serio con él, pero no le quería.<br />

—¿Pensabas que sí?<br />

—No sé lo que pensaba —dijo Reece—, pero ahora lo sé. Una mujer no habla<br />

como ella lo hacía <strong>de</strong> un hombre al que quiere; no le llama Trucha. Deena solo<br />

buscaba lo que buscaba.<br />

El esperó un momento.<br />

—¿Cambia eso tu intención <strong>de</strong> seguir con esto?<br />

—No. Fuera o no una zorra, no merecía morir <strong>de</strong> esa forma. Creo... —Se<br />

interrumpió bruscamente y le agarró <strong>de</strong>l brazo—. ¿Es ese Cas? ¿Es esa la furgoneta<br />

<strong>de</strong> Cas, Brody?<br />

El se volvió justo a tiempo <strong>de</strong> ver la parte trasera <strong>de</strong> una furgoneta negra que<br />

doblaba una esquina.<br />

—No lo sé. No la he visto bien.<br />

—Creo que era Cas —dijo Reece.<br />

Se preguntó si los habría visto. En ese caso, ¿por qué no había hecho sonar el<br />

claxon? ¿Por qué no había saludado con el brazo? ¿Por qué no había parado?<br />

—¿Que pue<strong>de</strong> estar haciendo en Jackson? —añadió.<br />

—La gente viene a Jackson por un montón <strong>de</strong> razones. No significa que nos<br />

haya seguido, Flaca. Sería muy difícil que viniera pisándonos los talones <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el<br />

pueblo.<br />

— 319 —

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!