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conferencias plenarias - Comite Latinoamericano de Matematica ...

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Conferencias Magistrales<br />

El Fracaso Escolar; la Motivación en Matemáticas; la Destransposición <strong>de</strong><br />

Conocimientos Escolares.<br />

André Antibi<br />

IREM <strong>de</strong> Toulouse, Université P. Sabatier<br />

118 route <strong>de</strong> Narbonne, 31062 Toulouse Ce<strong>de</strong>x<br />

France<br />

La conferencia estará constituida <strong>de</strong> tres partes distintas, conteniendo temas que me<br />

parecen muy importantes en la enseñanza <strong>de</strong> las matemáticas. Un estudio más profundo <strong>de</strong><br />

los puntos abordados en la conferencia ha sido realizado en artículos ya publicados.<br />

la. parte: El fracaso escolar: ¿Es una fatalidad? [1]<br />

En nuestra enseñanza, los alumnos son las principales víctimas <strong>de</strong> la "constante<br />

macabra". ¿De qué se trata exactamente? Cuando un profesor prepara control <strong>de</strong><br />

conocimientos y cuando escoge un baremo, lo hace <strong>de</strong> tal suerte, más o menos conciente,<br />

que las notas sean escalonadas convenientemente: es necesario que haya todo tipo <strong>de</strong> notas,<br />

buenas, medias, malas y esto no importando cual sea el contenido que se esté controlando, la<br />

calidad <strong>de</strong>l profesor, el nivel <strong>de</strong> clase. A aquellos que se sorprendan con tal afirmación, pido<br />

simplemente imaginar por un instante el caso <strong>de</strong> un profesor <strong>de</strong> matemáticas <strong>de</strong> una clase <strong>de</strong><br />

segundo (alumnos <strong>de</strong> 15 años), por ejemplo, que no pusiera a ningún alumno una nota inferior<br />

a 12 sobre 20. ¿Qué pasaría? La primera vez, se podría pensar, en el mejor <strong>de</strong> los casos,<br />

que se trata <strong>de</strong> un acci<strong>de</strong>nte, una coinci<strong>de</strong>ncia, la segunda vez, que el tema era<br />

verda<strong>de</strong>ramente muy simple y algunos colegas intrigados comenzarían a hacerse muchas<br />

preguntas. Si esta situación se reproduce en todos los controles, nuestro <strong>de</strong>safortunado<br />

colega probablemente pasaría en su establecimiento, como un profesor <strong>de</strong>masiado gentil,<br />

inclusive un poco <strong>de</strong>magogo, que no enfoca el programa convenientemente. Habría inclusive<br />

inquietu<strong>de</strong>s respecto a los alumnos, que, en tal contexto, serían orientados, al final <strong>de</strong> año,<br />

hacia las secciones científicas. Pero prácticamente nadie pensaría que el nivel <strong>de</strong> notas<br />

pueda ser producto, por ejemplo, <strong>de</strong> la competencia <strong>de</strong>l profesor, <strong>de</strong> su actitud para motivar a<br />

sus alumnos.<br />

Así, en todos los niveles, se pue<strong>de</strong> <strong>de</strong>cir que hay en nuestra manera <strong>de</strong> evaluar a los<br />

alumnos, una especie <strong>de</strong> constante: la proporción <strong>de</strong> malas notas. Está claro que, en tanto no<br />

nos <strong>de</strong>shagamos <strong>de</strong> esta constante, profundamente arraigada en nuestro espíritu, siempre<br />

habrá alumnos en situación <strong>de</strong> fracaso. Las modificaciones al programa, por ejemplo, no<br />

contribuirían en nada. Se <strong>de</strong>be reconocer que la existencia <strong>de</strong> una tal constante "macabra"<br />

(para muchos alumnos en todo caso), traduce una forma <strong>de</strong> injusticia en nuestro sistema <strong>de</strong><br />

evaluación que tien<strong>de</strong> a clasificar a los alumnos, en vez <strong>de</strong> evaluar realmente sus<br />

conocimientos.<br />

¿Cómo tratar <strong>de</strong> cambiar esta situación? Serán propuestas algunas sugerencias<br />

apoyadas sobre experimentos efectuados en el marco <strong>de</strong>l IREM <strong>de</strong> Toulouse.<br />

2a. parte: La Motivación en Matemáticas: ¿la <strong>de</strong>l profesor? ¿la <strong>de</strong>l alumno? [2]<br />

En la enseñanza <strong>de</strong> las matemáticas, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> hace varios años, parece que el problema <strong>de</strong><br />

la motivación <strong>de</strong> los alumnos ocupa un lugar importante: búsqueda <strong>de</strong> situaciones, <strong>de</strong><br />

aplicaciones a la vida cotidiana o a otras disciplinas, <strong>de</strong> ejercicios <strong>de</strong> tipo «Rally».<br />

Nosotros nos proponemos en este artículo resaltar el problema importante siguiente: ¿Los<br />

profesores no tienen ten<strong>de</strong>ncia, inconscientemente, a confundir su propia motivación y la <strong>de</strong><br />

los alumnos? Esta confusión es aún más lamentable que, a priori, los gustos <strong>de</strong> los<br />

profesores, profesionales <strong>de</strong> las matemáticas, no tienen ninguna razón <strong>de</strong> ser los mismos que<br />

los <strong>de</strong> los alumnos.<br />

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