Imperialismo Cultural en América Latina Historiografía y Praxis
y5nNvg
y5nNvg
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
92<br />
El Bu<strong>en</strong> Vecino Global<br />
estadounid<strong>en</strong>ses así ahogando a la música autóctona. 81 También<br />
sirve de ejemplo que la industria musical multinacional haya<br />
c<strong>en</strong>surado a los cantos Calipso de Trinidad y Tobago, vaciándolos<br />
de su cont<strong>en</strong>ido local insurrecto para el consumo masivo <strong>en</strong> los<br />
Estados Unidos (como fue el caso del canto popular “Trabajando<br />
para el dólar yanqui”), frecu<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te retrabajados también para<br />
su país de orig<strong>en</strong>. 82<br />
La negación de <strong>América</strong> <strong>Latina</strong> y el Caribe <strong>en</strong> el occid<strong>en</strong>te<br />
se deriva <strong>en</strong> parte de—y a su vez está condicionada por—las<br />
construcciones de id<strong>en</strong>tidad colonial y postcolonial promovidas<br />
por los intelectuales occid<strong>en</strong>tales. El acucioso análisis del mundo<br />
ori<strong>en</strong>tal hecho por Edward Said <strong>en</strong> su obra Ori<strong>en</strong>talismo es un<br />
espejo de ésta construcción occid<strong>en</strong>talista de Latinoamérica. Los<br />
ejemplos más drásticos incluy<strong>en</strong> el estereotipo de los mexicanos<br />
haraganes con sus grandes sombreros durmi<strong>en</strong>do la siesta bajo un<br />
cactus, o íconos religiosos creados a medida, como la Virg<strong>en</strong> de<br />
Guadalupe, que si<strong>en</strong>do mestiza fue considerada más aceptable por<br />
los colonizadores religiosos, para lograr que los locales tuvieran<br />
una mayor adaptación a la religión católica. Estas historias<br />
positivistas, producidas rutinariam<strong>en</strong>te <strong>en</strong> el occid<strong>en</strong>te, traducidas<br />
y movilizadas por las clases dominantes latinoamericanas, retratan<br />
a los procesos históricos de la región como una cad<strong>en</strong>a de<br />
Conquista, Indep<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia y República—casi libre de la influ<strong>en</strong>cia<br />
del <strong>Imperialismo</strong> moderno o las luchas populares—y la provincia<br />
de patriarcados. 83 La negación de una activa historia feminista ha<br />
ido a la par del estereotipo de género de esas construcciones, que<br />
se acercan a la erradicación de cualquier vestigio de historia<br />
feminista <strong>en</strong> Latinoamérica.<br />
Vale destacar que <strong>en</strong> 1992, las movilizaciones populares e<br />
indíg<strong>en</strong>as que ocurrieron a través de toda <strong>América</strong> <strong>Latina</strong><br />
desafiaban a la usurpación del simbolismo de V c<strong>en</strong>t<strong>en</strong>ario por la<br />
81. Reyes, F., “The ‘New Song’ and its Confrontation in Latin America”, <strong>en</strong><br />
Nelson, C. et al. (eds.), Marxism and the Interpretation of Culture, Londres,<br />
Macmillan, 1988, págs. 447-60.<br />
82. Ver Holton, Capítulo X, este libro.<br />
83. Ver Labarca, A., Feminismo Contemporáneo, Santiago de Chile, Zig Zag,<br />
1947; Kirkwood, J., Ser Política <strong>en</strong> Chile: Los Nudos de La Sabiduría, Santiago<br />
de Chile, Cuarto Propio, 1990: Fisher, J., Out of the Shadows: Wom<strong>en</strong>,<br />
Resistance and Politics in South America, Londres, Latin American Bureau,<br />
1993.