20.09.2015 Views

Hacia una Teologia del Antiguo Testament - Walter C. Kaiser Jr_

  • No tags were found...

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

http://es.scribd.com/doc/97117904/<strong>Hacia</strong>-Una-<strong>Teologia</strong>-Del-<strong>Antiguo</strong>-<strong>Testament</strong>o-<strong>Walter</strong>-c-<strong>Kaiser</strong>-Hijo<br />

Los dos últimos pasajes son más dificiles. Según Génesis 22:16–18 a Abraham se le dijo: «Como<br />

(k ya‘an ’ a šer) has hecho esto [has estado dispuesto a ofrecer a tu hijo] … te bendeciré … Puesto<br />

que (‘ēqeḇ a šer) me has obedecido.» La bendición se repite a Isaac en Génesis 26:5: «Porque (‘ēqeḇ<br />

a<br />

šer) Abraham me obedeció y cumplió mis preceptos y mis mandamientos, mis normas y mis<br />

enseñanzas.» A nuestro juicio, el condicionamiento no estaba adherido a la promesa, sino solo a los<br />

participantes que se beneficiarían de estas promesas perdurables. Si la condición de fe no era<br />

evidente, el patriarca se convertiría en un simple transmisor de la bendición sin heredar personal y<br />

directamente alg<strong>una</strong> de sus dádivas. Tal fe debe ser evidente también en <strong>una</strong> obediencia que procede<br />

de la fe. Sin duda, la promesa no se inició ni en el capítulo 22 ni en el 26; ya hacía mucho que se<br />

había promulgado. Sin embargo, cada capítulo tuvo un momento crucial de prueba o transición.<br />

Además, la elección de Dios no solamente tuvo el propósito de bendecir a Abraham y a la nación<br />

(18:18), sino también el de encargarle a él y a su casa que instruya «a sus hijos y a su familia, a fin<br />

de que (l e ma‘an) se mantengan en el camino <strong>del</strong> SEÑOR y pongan en práctica lo que es justo y recto.<br />

Así el Señor cumplirá lo que le ha prometido» (v. 19).<br />

La relación es innegable. El deber de obediencia (ley, si lo desea) estaba ligado íntimamente con<br />

la promesa como <strong>una</strong> secuela deseada. Por lo tanto, la transición al tiempo venidero de la ley<br />

mosaica no debía ser tan difícil para cualquiera que de manera adecuada escuchó toda la revelación<br />

de la promesa en la Era Patriarcal.<br />

Palabra de garantía<br />

A través de todas las narrativas patriarcales corre además otro asunto como parte de la bendición<br />

de la promesa. Era simplemente el voto de Dios: «Yo estaré contigo.»<br />

En realidad, la primera vez que se mencionó explícitamente la presencia de Dios es donde el<br />

escritor comentó que «Dios acompañó [―estaba con‖ (’eṯ)]» el hijo de Agar, Ismael (Gn 21:20).<br />

Luego apareció como <strong>una</strong> palabra en las bocas filisteas de Abimélec y Ficol dirigida a Abraham:<br />

«Dios está contigo [con (‘im)] en todo lo que haces» (21:22), y más tarde a Isaac: «Nos hemos dado<br />

cuenta de que el SEÑOR está contigo [con (‘im)]» (26:28).<br />

Hay ciento cuatro ejemplos de esta fórmula de la presencia divina en las que se emplean las dos<br />

preposiciones hebreas traducidas «con» (’eṯ y ‘im)] en el <strong>Antiguo</strong> <strong>Testament</strong>o. De estos, catorce<br />

aparecen en las narrativas de Isaac y Jacob donde se les asegura la presencia de Dios. 13 Dios apareció<br />

a Isaac con las palabras consoladoras: «No temas, que yo estoy con (’eṯ)tigo» (26:24). O como dijo<br />

en <strong>una</strong> aparición anterior: «Vive en este lugar por un tiempo. Yo estaré con (‘im)tigo» (26:3). Para<br />

Jacob, fue un sueño de <strong>una</strong> escalera con la promesa de Dios cuando él partió para Jarán: «Yo estoy<br />

con (‘im)tigo» (28:15).<br />

A esto, Jacob prometió: «Si Dios me acompaña [está con (‘im) migo] y me protege en este viaje<br />

… entonces el SEÑOR será mi Dios» (Gn 28:20–21). De nuevo, cuando Jacob estaba a punto de<br />

regresar a Canaán, el Señor le repitió su promesa anterior: «Yo estaré con (‘im)tigo» (31:3). Por<br />

consiguiente, Jacob repitió a Labán que en verdad el Señor estuvo con él (31:5; 35:3). De igual modo<br />

13<br />

Horst D. Preuss, «’eth, ‘im», Theological Dictionary of the Old <strong>Testament</strong> [Diccionario teológico <strong>del</strong> <strong>Antiguo</strong><br />

<strong>Testament</strong>o], eds. G.J. Botterweck and H. Ringgren: trad. John T. Willis, Eerdmans, Grand Rapids, MI, 1974,<br />

tomo 1, pp. 449–63, esp. p. 456.<br />

http://es.scribd.com/Benami_77

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!