Su historia y su obra

en esta ciudad tan útil proyecto.— Dios guarde a V.S. muchos años. Madrid,
30 de mayo de 1842.— Infante.— Señor Jefe Político de Valencia” (40).
En el documento aparece consignada la aprobación oficial. Fechado el documento
en 30 de mayo, en junio debió tener lugar su inclusión en los documentos oficiales (41).
2.4.— LA INAUGURACION DE LA CAJA
No había tiempo que perder. La larga demora había conseguido que los
preparativos estuvieran previstos, a la expectativa de una fecha oportuna. Fue ésta el 17
de julio de 1842.
Por la extensa reseña que publicó el órgano informativo de la SEAPV, a distancia de
los hechos, sabemos en qué consistió el acto, la solemnidad que revistió, las personas
asistentes y un acervo considerable de detalles, reflejo del momento y de los resultados que
se prometían. Dice así:
“El domingo 17 del pasado julio se celebr6 en el espacioso teatro de la
Universidad, a las once de la mañana, la gran sesión pública para la
instalación de la Caja-Banco. La sociedad, que para excitar el interés de todas
las clases, no habrá omitido medio de anunciar la celebración de tan augusto
acto, vio satisfechos sus deseos por una concurrencia distinguida y numerosa,
que dio muestras de simpatizar con los designios patrióticos de la Corporación.
El Jefe superior politico, el general segundo cabo, el general subinspector de
ingenieros, el señor Gobernador de este Arzobispado, una sección de la
Diputación, otra del Ayuntamiento, otra del Cabildo eclesiástico, varios
señores curas y beneficiados, la oficialidad de los cuerpos de esta guarnición
e individuos de todas las clases del pueblo, desde las más influyentes hasta
las menos acomodadas, todos acreditaron con su asistencia, que esta empresa
era un pensamiento general, era cosa de todos, puesto que todos tomaban
parte tan directa en su realización”.
Con ello se hace la presentación de las personalidades oficiales, especialmente la del
Gobernador Civil, que en nombre de la Reina confería al establecimiento carácter legal. De
que contaba con la aprobación real nos da idea concretamente el hecho de que el director de
la Sociedad Económica, Barón de Santa Bárbara, descubrió un retrato de S.M. antes de
comenzar la sesión. El mismo director leyó a continuación un discurso en el que después de
enumerar las ventajas que tal hecho suponía, felicitó a la Sociedad Económica por haber
llevado a cabo el fecundo propósito y rindió tributo de agradecimiento al Gobernador Civil
por su cooperación y esfuerzos.
Acto seguido el “Jefe superior político” improvisó una alocución en la que manifestó
la complacencia del Gobierno ante la realidad de que Valencia dispusiera de una Caja de
Ahorros y Banco de Socorros y se congratuló con la Sociedad Económica por sus desvelos en
favor del bien general.