Nuevo Testamento - iglesia bautista getsemani de montreal

Y extendiéndome a lo que está delante: esto es, los privilegios y responsabilidades de
la vida cristiana, sea la adoración, el servicio, o el desarrollo personal del carácter cristiano.
3:14 Mirándose a sí mismo como corredor en una carrera, Pablo se describe ejerciendo
todos los esfuerzos dirigiéndose hacia la meta, para conseguir el premio del
llamamiento de Dios en Cristo.
La meta es la línea de llegada al final de la pista de carreras. El premio es la
recompensa dada al ganador. Aquí, la meta sería el fin de la carrera de la vida, y quizá más
concretamente el Tribunal de Cristo. El premio sería la corona de justicia que Pablo
describe en otro pasaje como el premio para los que han corrido bien (2 Ti. 4:8).
El supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús incluye todos los propósitos que
Dios tenía en mente al salvarnos. Incluye la salvación, la conformidad a Cristo, nuestra
condición de coherederos juntamente con Él, un hogar en el cielo, e innumerables otras
bendiciones espirituales.
VII. EXHORTACIÓN A UN ANDAR CELESTIAL, COMO
LO EJEMPLIFICA EL APÓSTOL (3:15–21)
3:15 Así que, todos los … perfectos, o maduros, deberían compartir la disposición de
Pablo a padecer y morir por Cristo y a poner todos los esfuerzos de su parte en la carrera
por la semejanza con el Señor Jesús. Esta es la perspectiva madura de la fe cristiana.
Algunos la designarían como extrema, radical o fanática. Pero el apóstol dice que los
maduros verán que esta es la única respuesta cuerda, lógica y responsable a Aquel que
derramó Su sangre, dando Su vida por ellos en el Calvario.
Si en algo sentís de un modo diferente, también esto os lo revelará Dios. Pablo se da
cuenta de que no todos estarán de acuerdo con él en la adopción de una filosofía tan
peligrosa. Pero expresa la confianza de que si alguien está verdaderamente dispuesto a
conocer la verdad acerca de esta cuestión que Dios se lo revelará. La razón de que en la
actualidad tenemos una cristiandad tan cómoda y auto-complacida es que no queremos
conocer la verdad; no estamos dispuestos a obedecer las demandas del cristianismo ideal.
Dios está dispuesto a mostrar la verdad a los que estén dispuestos a seguirla.
3:16 Luego el apóstol añade que, mientras tanto, deberíamos vivir en conformidad a la
luz que el Señor nos haya dado. No servirá esperar hasta que lleguemos a un más pleno
conocimiento de lo que se demanda de nosotros como cristianos. Mientras esperamos que
el Señor nos manifieste las plenas implicaciones de la cruz, deberíamos obedecer aquello
de verdad que hayamos recibido.
3:17 Ahora Pablo pasa a la exhortación, primero alentando a los filipenses a ser
seguidores o imitadores de él mismo. Es un tributo a su vida ejemplar que pudiese escribir
estas palabras. A menudo oímos las palabras, dichas en chanza: «Haz lo que te digo; no
como hago». ¡No era este el caso del apóstol! Él podía presentar su propia vida como
modelo de una total devoción a Cristo y a Su causa.
Lehman Strauss comenta:
Pablo se consideraba el receptor de la misericordia de Dios, para poder ser un
«modelo»; de este modo toda su vida, después de su conversión, fue dedicada a mostrar a
los otros un bosquejo de lo que un cristiano debería ser. Dios salvó a Pablo a fin de poder
mostrar mediante el ejemplo de su conversión que lo que Jesucristo hizo por Él puede