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2010_CEOCB_monografia Apaseo el grande.pdf - Inicio

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Historia d<strong>el</strong> Municipio de <strong>Apaseo</strong> <strong>el</strong> Grande<br />

El día siguiente, 4 de enero, en vista que <strong>el</strong> Ayuntamiento de C<strong>el</strong>aya se desdecía de lo<br />

dicho y hecho, <strong>el</strong> Alcalde Mayor ordena que se mantenga <strong>el</strong> “status quo” entre <strong>Apaseo</strong> y Mayorazgo,<br />

revoca lo actuado por <strong>el</strong> Ayuntamiento de C<strong>el</strong>aya y ordena que los remanentes d<strong>el</strong> agua d<strong>el</strong><br />

riego sean regresados al río donde “los alla a quien con derecho le pertenezca” 86 .<br />

Es de esta manera como <strong>el</strong> pueblo de <strong>Apaseo</strong> y las poblaciones sujetas a su jurisdicción<br />

como San Pedro Tenango, San Bartolomé Aguascalientes y San Migu<strong>el</strong> de Istla empiezan a adquirir<br />

personalidad propia.<br />

Es durante la década de 1640 a 1650 cuando <strong>Apaseo</strong> comienza a tomar la vocación<br />

económica que no le abandonaría durante <strong>el</strong> resto d<strong>el</strong> virreinato cuando a la ya tradicional ganadería<br />

en las haciendas de Istla, <strong>el</strong> Peñón y <strong>Apaseo</strong> <strong>el</strong> Alto se agrega la manufactura de t<strong>el</strong>as principalmente<br />

en la zona de Istla, donde en 1647 existían ya <strong>el</strong> Obraje de San Diego de Buenavista 87 , actividad<br />

que aún atestigua los topónimos de Obraje y Obraju<strong>el</strong>o 88 de varias comunidades apaseenses.<br />

En la hacienda d<strong>el</strong> Peñón entretanto se había establecido una tenería de pi<strong>el</strong>es.<br />

Hacia <strong>el</strong> año de 1640 es cuando a las Repúblicas de Indios establecidas en <strong>el</strong> momento<br />

de las fundaciones y congregaciones de los pueblos de San Juan Bautista de <strong>Apaseo</strong>, San Pedro<br />

Tenango, San Bartolomé Aguascalientes y San Migu<strong>el</strong> de Istla se les agrega como autoridad civil<br />

sobre la demarcación de <strong>Apaseo</strong> la figura d<strong>el</strong> Teniente de Alcalde Mayor d<strong>el</strong> Pueblo de <strong>Apaseo</strong> y su<br />

Partido, siendo <strong>el</strong> Partido una jurisdicción geográfica que debió haber correspondido a la d<strong>el</strong><br />

municipio de <strong>Apaseo</strong> hasta la división de 1947.<br />

El primer Teniente de Alcalde Mayor d<strong>el</strong> que tenemos noticias ejercía ya su cargo <strong>el</strong> 19<br />

de Marzo de 1640 y se llamaba Pedro de Navia 89 .<br />

Cuando Fray Isidro Félix de Espinosa describía a las doctrinas franciscanas de la<br />

Provincia de Michoacán, comenta que en la doctrina y convento de <strong>Apaseo</strong> moraban cuatro padres<br />

de los más ejemplares de la provincia 90 . Para corroborar este dicho debiera mencionarse que en<br />

1606 ó 1607 murió en <strong>el</strong> convento de <strong>Apaseo</strong> <strong>el</strong> padre fray Migu<strong>el</strong> López, ex ministro provincial y<br />

vicecomisario general de los franciscanos, su cuerpo fue reclamado por Don Diego de Tapia y<br />

trasladado a Querétaro 91 .<br />

86 AGN. Tierras. Vol. 187. folios 58 a 110.<br />

87 APA. Bautismos de Razas. Siglo XVII. Sin folio.<br />

88 Un obraje puede ser definido como <strong>el</strong> sitio donde se contienen todas las etapas de producción de t<strong>el</strong>as de lana y que ofrece residencia a una fuerza laboral<br />

considerable y especializada, una característica adicional es que sus propietarios especialmente en Querétaro eran miembros de las principales familias<br />

de la ciudad, bien conectadas socialmente y de gran fuerza económica, mientras que un obraju<strong>el</strong>o no podía realizar todas las actividades de producción<br />

de t<strong>el</strong>as de lana y sus propietarios eran personas de baja condición social y económica. Salvucci, Richard J. “Textiles y capitalismo en México, una historia<br />

económica de los obrajes, 1539-1840”. México. Alianza Editorial. 1992. Págs. 34, 62 a 63.<br />

89 APA. Entierro de Españoles, Libro 1. siglo XVII. Sin folio. (19 de marzo de 1640).<br />

90 Félix de Espinosa, Fr. Isidro. Crónica de la Provincia de los Apóstoles San Pedro y San Pablo de Michoacán. (Apuntamientos bio-bibliográficos por <strong>el</strong><br />

Dr. Nicolás León y Prólogo y notas de José Ignacio Dávila Garibi). México. 1945. Editorial Santiago. Pág. 273<br />

91 De la Rea, Alonso; “Crónica de la orden de nuestro seráfico padre San Francisco. Provincia de San Pedro y San Pablo de Michoacán en la Nueva España”.<br />

Patricia Escandón, editora. El Colegio de Michoacán - Fideicomiso Teixidor. 1996. México. Pág. 189. El nombre completo de este r<strong>el</strong>igioso era Fray Migu<strong>el</strong><br />

López de Hormastigui. En Ramírez, Mina. “La familia Tapia y su r<strong>el</strong>ación con los franciscanos, Versión de Luisa d<strong>el</strong> Espíritu Santo”. En “Indios y franciscanos<br />

en la construcción de Santiago de Querétaro (siglos XVI y XVII). Gobierno d<strong>el</strong> Estado de Querétaro. Querétaro. 1997. Pág. 160.<br />

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