Doctrina y Convenios e Historia de la Iglesia - Seminaries ...

El período de Ohio y Misuri
cuán difícil es ser perfectos. Comparta la siguiente declaración
del presidente George Q. Cannon:
“Si cualquiera de nosotros es imperfecto, es nuestro
deber orar para recibir el don que nos hará perfectos.
¿Tengo yo imperfecciones? Estoy lleno de ellas. ¿Cuál es
entonces mi deber al respecto? Orar a Dios para que me
conceda los dones que corregirán esas imperfecciones”
(Gospel Truth, tomo I, pág. 196).
Pregunte: ¿Qué nos ha dado el Señor para ayudarnos a lograr
la perfección?
Entregue las piezas del rompecabezas a los alumnos y pídales
que busquen en la sección 46 el versículo anotado en la pieza
que les haya correspondido. Dígales que expliquen qué don
del Espíritu se describe en sus respectivos versículos y nombren
una situación en la cual ese don podría ser de utilidad.
(Válgase de las explicaciones de los dones del Espíritu que
se encuentran en las páginas 95–96 de Doctrina y Convenios,
Manual para el alumno: Religión 324–325.) Pida a los alumnos
que den vuelta las piezas del rompecabezas, lo armen todos
juntos y lean los versículos que en él aparecen (D. y C. 46:11–12).
Luego pregunte:
• ¿Qué relación tienen esos versículos con los versículos 13–25?
• ¿Por qué todo miembro es importante en la Iglesia del Señor?
• ¿Piensan que esa lista incluye todos los dones del Espíritu?
Comparta las siguientes declaraciones. El élder Bruce R.
McConkie escribió:
“Los dones espirituales son infinitos, tanto en número
como en diversidad. Los que se mencionan en la palabra
revelada son sencillamente una muestra de lo que
la gracia divina de un Dios benevolente concede
ilimitadamente a quienes le aman y le prestan servicio”
(citado en “…recordando siempre para qué son dados”,
Liahona, diciembre de 1997, pág. 25).
El élder Marvin J. Ashton, que fue miembro del Quórum de
los Doce, dijo:
“Quisiera mencionar algunos [dones] al azar, a modo
de ejemplo, los cuales no siempre son evidentes, pero sí
son muy importantes…
“El don de preguntar, el don de escuchar, el don de oír
y de emplear una voz suave y apacible, el don de poder
llorar, el don de evitar la contención, el don de congeniar,
el don de evitar repeticiones vanas, el don de obrar en
rectitud, el don de no condenar, el don de buscar la guía
de Dios, el don de ser un discípulo, el don de interesarse
en los demás, el don de meditar, el don de orar, el don
de testificar y el don de recibir el Espíritu Santo” (“Hay
muchos dones”, Liahona, enero de 1988, pág. 19).
Explique a los alumnos que el Señor revela dones espirituales
por medio de las bendiciones patriarcales. Dígales que el grado
hasta el cual podemos recibir dones espirituales depende de
nuestra fe y rectitud. Pídales que escriban en una hoja de papel
las respuestas a las preguntas siguientes:
• ¿Qué debo hacer si se me ha bendecido con un don
espiritual? (véase el vers. 32).
• ¿Qué dones del Espíritu he recibido?
• ¿Qué dones me gustaría tener?
• ¿Qué puedo hacer para obtener esos dones? (véase
Moroni 7:48).
Doctrina y Convenios 46:7, 27–29. A los obispos y demás
líderes de la Iglesia se les da el don de juzgar cuáles
dones espirituales son de Dios. (15–20 minutos.)
Haga la gráfica siguiente en la pizarra, pero deje la columna
de la derecha en blanco.
El Evangelio de Cristo
Amor
Familia
Humildad
Fe
Dicha y felicidad
duraderas
Arrepentimiento
Las imitaciones de Satanás
Lujuria
Relación entre homosexuales
Arrogancia
Escepticismo, dudas
Placer momentáneo
El creer que no hay
necesidad de arrepentirse
porque el pecado no existe
Comparta con los alumnos la siguiente declaración del élder
Marion G. Romney, en ese entonces miembro del Quórum de
los Doce:
“Da la impresión de que hay algunas manifestaciones
aparentemente sobrenaturales que no tienen nada que
ver con el poder del Espíritu Santo. La verdad es que
hay muchas que no lo son. El mundo de hoy día está
lleno de imitaciones y siempre ha sido así…
“Algunas de esas falsificaciones son burdas y fáciles de
detectar, pero otras imitan muy bien las manifestaciones
verdaderas del Espíritu. Por lo tanto, la gente se confunde
y se deja engañar por ellas” (en Conference Report, abril
de 1956, pág. 70).
Pida a los alumnos que nombren algunas de las imitaciones
de Satanás por cada uno de los principios del Evangelio que
se encuentran anotados en la pizarra, y escriba las respuestas
de ellos en la columna en blanco de la gráfica. Lean Doctrina
y Convenios 46:7 y vean qué dijo el Señor que impediría que
fuéramos engañados por las falsificaciones de Satanás (el
Espíritu). Lean los versículos 8–10, 30–33 y pida a los alumnos
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