Doctrina y Convenios e Historia de la Iglesia - Seminaries ...

Doctrina y Convenios 88
Antes de
Su venida
• Dios testifica
por medio de
señales en los
cielos y en la
tierra (véase
D. y C. 88:87–
91; véase
también Mateo
24:29; D. y C.
43:25).
• Los ángeles
declaran:
“. . .Preparaos,
preparaos, oh
habitantes de
la tierra, porque.
. . el
Esposo viene”
(D. y C. 88:92).
• La señal del
Hijo del
Hombre (véase
D. y C. 88:93;
véase también
Mateo 24:30).
• La primera
trompeta declara
que la
iglesia grande
y abominable
está presta para
ser quemada
(véase D. y C.
88:94).
• Hay silencio en
el cielo por
espacio de
media hora
(véase D. y C.
88:95; véase
también
D. y C. 38:11–12).
A Su venida
• La faz del Señor
es descubierta
(véase D. y C.
88:95).
• La resurrección
de los seres
celestiales tiene
lugar (véase
D. y C. 88:96–98;
véase también
D. y C. 76:50–70).
• La segunda
trompeta declara
la resurrección
que finalmente
reciben
los seres terrestres
(véase
D. y C. 88:99;
véase también
D. y C. 76:71–80).
• La tercera trompeta
declara la
resurrección de
los seres telestiales
(véase
D. y C. 88:100–
101; véase
también D. y C.
76:81–90).
• La cuarta trompeta
declara la
resurrección de
quienes permanecen
sucios aún
(véase D. y C.
88:102; véase
también el vers. 32).
• La quinta trompeta
declara
la hora de Su
juicio (véase
D. y C. 88:103–
104).
• La sexta trompeta
declara que
Babilonia ha
caído (véase
D. y C. 88:105;
véase también
Apocalipsis 14:8).
• La séptima
trompeta
declara: “¡Consumado
es!”
(véase D. y C.
88:106; véase
también D. y C.
133:46–53).
Después de
Su venida
• Los seis ángeles
primeros
declaran los
hechos de los
hombres y de
Dios durante los
primeros 6.000
años (véase D. y
C. 88:108–110).
• El séptimo ángel
declara que
Satanás será
atado (véase D.
y C. 88:110;
véase también
Apocalipsis
20:1–3;
1 Nefi 22:26).
• Después de
1.000 años,
Satanás y
Miguel reúnen
sus ejércitos
(véase D. y C.
88:111–113;
véase también
Apocalipsis
20:7–8).
• Miguel sale
vencedor en la
bata-lla (véase
D. y C. 88:114—
115).
• Los santificados
no verán nunca
más la muerte
(véase D. y C.
88:116).
Doctrina y Convenios 88:117–137 (Dominio de
las Escrituras, Doctrina y Convenios 88:123–124).
Los lugares en los cuales recibimos instrucción sobre
el Evangelio deben ser sitios de oración, ayuno, fe,
orden y rectitud. (25–30 minutos.)
Diga a los alumnos: Imaginen que se les ha escogido para ser
“maestro de seminario por un día”.
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• ¿Qué reglas impondrían a su clase?
• ¿Qué horario tendrían ese día?
• ¿Habría algo en especial que les gustaría hacer para la clase?
Si fuera así, ¿qué les gustaría hacer?
• ¿Habría algo especial que les gustaría que los alumnos
hicieran?
El presidente Gordon B. Hinckley, en ese entonces Consejero
de la Primera Presidencia, dio este consejo a los maestros de
seminario:
“En Kirtland, se estableció una Escuela de los Profetas
para enseñar a los nuevos en la fe. Ahora ustedes enseñan
escuelas de futuros profetas. Enséñenles con poder,
convicción y fe” (Counsel to Religious Educators [discurso
pronunciado a los maestros de religión, 14 de septiembre
de 1984], pág. 7).
• Si se basan en la declaración del presidente Hinckley, ¿de
qué modo cambiarían su manera de enseñar?
• ¿Qué piensan al saber que el seminario es una escuela para
“futuros profetas”?
Comparta la información que se encuentra en el comentario
correspondiente a Doctrina y Convenios 88:117–141 en
Doctrina y Convenios, Manual para el alumno: Religión 324–325,
pág. 192. Lean la siguiente declaración que hizo el presidente
Hinckley durante el mismo discurso:
“La Escuela de los Profetas se llevaba a cabo en la tienda
de Whitney. (En ocasiones se le llamaba la Escuela de
los Élderes y otras la Escuela de los Profetas.) Ésta era
una reunión de las Autoridades Generales de ese tiempo.
Su fundación y dirección tenían como objeto ser un
lugar de capacitación, principalmente para el servicio
misional. Era una época en la cual los cielos derramaban
abundante conocimiento, en la que se recibieron muchas
revelaciones como fundamento sobre el cual descansar
esta gran obra…
“Sesenta y dos de las revelaciones que se encuentran en
Doctrina y Convenios se recibieron en ese período de
Ohio y en ese ambiente… La obra se fortaleció y se
integró en forma extraordinaria.
“Orson Pratt escribió de esa época: ‘Dios estaba allí y
también Sus ángeles, y el Espíritu Santo se encontraba
en medio de la gente; las visiones del Todopoderoso se
abrieron para la mente de los siervos del Dios viviente;
el [velo] fue quitado de la mente de muchos; ellos vieron
abrirse los cielos; contemplaron los ángeles de Dios;
escucharon la voz del Señor; y fueron llenos, desde la
cabeza hasta los pies, del poder y la inspiración del
Espíritu Santo’. (En Journal of Discourses, tomo XVIII,
pág. 132.)” (Counsel to Religious Educators, págs. 4–5).