16.11.2012 Views

Feminismos-negros-1

Feminismos-negros-1

Feminismos-negros-1

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

40<br />

<strong>Feminismos</strong> <strong>negros</strong><br />

la objetivación de la sexualidad de las mujeres dentro de un orden patriarcal;<br />

pero que al tiempo reclama los cuerpos de las mujeres como sujetos sensuales y<br />

sexuales. Carby otorga a estas mujeres el papel de intelectuales orgánicas, en el<br />

sentido gramsciano del término. No solo eran parte de la comunidad sujeto de<br />

su música, eran también producto del movimiento rural-urbano. Carby analiza<br />

desde este contexto social, las migraciones rural-urbanas (sur-norte), la forma<br />

en que las actuaciones y los discos refl ejaron y marcaron las relaciones sexuales<br />

dentro de la comunidad negra, así como el terreno cultural en el que las diferencias<br />

sexuales se disputaban y redefi nían. 22<br />

Ángela Davis parte del trabajo de Carby y de su obra anterior Mujeres,<br />

«raza» y clase, para buscar en el blues femenino de los años veinte los rastros<br />

y rostros de una tradición secreta de un feminismo de clase trabajadora, que<br />

coexiste junto a una tradición de clase media negra, pero cuyos códigos y<br />

formas de expresión eran completamente distintos. Frente a la obra (escrita)<br />

de las intelectuales del feminismo negro, referentes tradicionales del movimiento<br />

feminista negro, los textos (no escritos) del blues femenino aparecen<br />

como el vehículo de expresión de las ideas producidas en y por las mujeres<br />

pobres y de clase trabajadora, aquéllas que nunca podrían acceder a los textos<br />

escritos y aquellas que tampoco se reconocen ―salvo desde las categorías de<br />

exclusión― en las imágenes que de ellas proyecta tanto el sistema hegemónico<br />

(blanco) como la clase media negra. En este sentido, el blues es el heredero<br />

de las canciones de trabajo y de los espirituales de la época de la esclavitud.<br />

Músicas que conseguían traducir los deseos y los lamentos de la población<br />

negra en una expresión de carácter colectivo, en un discurso que, en la medida<br />

en que era inaccesible para los grupos dominantes, funcionaba como una<br />

expresión comunitaria de la experiencia de ser negro. Pero mientras la música<br />

de la esclavitud ―ambas, la secular y la religiosa― era la quintaesencia de la<br />

música colectiva en el sentido de que era colectivamente creada y refl ejaba al<br />

anhelo de la comunidad por la libertad, el blues ―la forma musical afroamericana<br />

predominante del periodo post-esclavitud― articuló una nueva valoración<br />

de los distintos deseos y necesidades emocionales. El nacimiento del<br />

blues es una prueba estética de nuevas realidades psicosociales entre la población<br />

negra. Frente a los referentes colectivos del periodo anterior, se incorporan<br />

dos rasgos del sistema hegemónico, la individualidad y la diferenciación<br />

sexual. Ángela Davis ya había argumentado en trabajos anteriores que la población<br />

negra había conseguido durante la esclavitud la hazaña prodigiosa de<br />

22 Hazel Carby, «It Jus Be’s Dat Way Sometime: The Sexual Politics of Women’s Blues», Radical<br />

America, vol. 20, núm. 4, 1986, pp. 9-24.<br />

se permite la copia ©

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!