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47enfermería, contabilidad, turismo, manejo dealimentos, y los hombres tomando mecatrónica,electrónica, y lo mismo pasa en carreras técnicassuperiores de esta naturaleza. En las escuelas másimportantes de educación superior del país lasmujeres son apenas el 18% de los graduados y lasmatrículas deben de estar más bajo que un 30%”(ONG, República Dominicana).La formación también deberá integrar componentesque sensibilicen a los jóvenes sobre las cuestionesde los derechos laborales y la seguridad y salud enel trabajo.iii. barreras para la permanenciade las niñas en la educaciónFuente: fotografía del registro de las profesiones que dijeron algunas delas niñas y niños durante el estudio (2012).trabajo y la consecuente segregación por género enel mercado laboral, las posibilidades que tienen lasniñas de acceder a los distintos oficios uocupaciones pueden verse reducidas. Con el fin degarantizar que las oportunidades educativas norefuercen involuntariamente las desigualdades degénero existentes, es preciso poner especialatención en facilitar el acceso de las niñas a laformación profesional no sexista, lo que todavía esun reto en nuestros países.“(...) sin embargo, persiste la tradicionalidad en lascarreras, salvo que en los últimos años las que erantradicionalmente masculinas ya se han idofeminizando, como medicina y derecho. Es unfenómeno que [se] está dando casi en todo elmundo (…). Todavía tenemos una baja presencia demujeres en carreras relacionadas con ingeniería,ciencia dura y las matemáticas. [En] Las ciencias,salvo en química y biología y la ingeniería química,las mujeres están en franca minoría en relación alos hombres, en todas las nuevas carreras de punta,tanto a nivel técnico como politécnicos. Nosotros[República Dominicana] tenemos una escuelatécnica que tiene una oferta tecnológica en los dosúltimos años de secundaria (3°y 4°), ahí también lasmujeres están eligiendo carreras tradicionales:Si bien la formación en capacidades debe llevar alempleo en las economías en las que el trabajoindependiente es clave, también deberá concederseimportancia al apoyo posterior a la formación, demodo que vincule a los participantes coninstituciones financieras y proyectosgubernamentales con el fin de que puedanbeneficiarse de préstamos flexibles, garantías ysubsidios, se vinculen con el mercado y tenganacceso a otros servicios de desarrollo de caráctermás empresarial.Por otra parte, las adolescentes y mujeres jóvenesengrosan las cifras del desempleo en la región yreciben, desde distintos actores e instituciones,mensajes contradictorios y confusos sobre su papelcomo mujeres. De una parte, está la presión por laautonomía, porque a cierta edad son vistas comouna carga para la economía familiar, y eso las llevaa pensar en “cualquier” trabajo o proyecto de vidaque les permita salir del hogar y dejar la relación dedependencia con sus padres. Esto incluye pensaren formar su propia familia y embarazarsetempranamente como una opción posible decambiar de vivienda (por ejemplo, en dirección a lacasa de los suegros 31 ). Por otra parte, está tambiénel deseo de desvincularse de su hogar de origen31Este tema es tratado con mayor profundidad en el de embarazoadolescente.