Enigma (Los Van Vladoisqui)

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- Hablo en serio, el día se está poniendo. No querrás llegar en la
noche - interrumpió.
No podía callarlo, eran mis sospechas y Tom merecía saberlas.
- ¿Tom? ¿Viste alguna vez el testamento de tu abuelo? - Inquirí de
pronto.
- Por supuesto, cuando hicieron la lectura de su testamento, me
heredó a mí y a mi padre sus posesiones -
- Pero dijiste que tu abuelo despreciaba a tu padre, ¿por qué habría
de dejarle parte de la herencia? - Acusé.
- No comprendo ¿Qué quieres decir? -
Su rostro se volvió serio.
“Dile”
- Está bien… encontré dos testamentos completamente diferentes,
uno debe de estar falsificado, y si estaba aquí… quiere decir que tu
padre fue quien lo falsificó -
Puse los testamentos encima del escritorio para que pudiera leerlos,
de inmediato sus cejas se fruncieron, su mirada se hizo apagada y una
expresión enojada cubrió sus facciones, así que continué sin darle
tiempo de interrumpirme.
- No te lo había dicho antes pero… encontré en los documentos de
la biblioteca a un tal detective Benjamín Adams que acusó a tu padre
como principal sospechoso, se basó en el testamento para culparlo,
pero tu padre tenía el apoyo de la iglesia. El detective concluyó eso
porque en una de las pláticas que tuvo con tu abuelo le mencionó su
voluntad, esta no encajaba con lo que escribió en el testamento. La
única forma de obtener la fortuna era… deshaciéndose de su esposa,
su suegro… y su hijo -
Su respiración se agitó, en su pecho se denotaba la inhalación y
violenta; su enojo se expresó en sus ojos de forma más intensa.
Permaneció así por unos segundos y luego la furia quebró la jaula y
de sus labios emergieron palabras crudas, feroces.
- ¿Cómo te atreves a decir tan atroz barbaridad? - Apretando los
dientes.
- Tom, él siempre estuvo tras la fortuna, no puedes… -
. - ¡No! ¡Estas mintiendo! - Me acusó gritando e interrumpió con un
tono de voz que nunca antes había utilizado conmigo.