Enigma (Los Van Vladoisqui)

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Toda mi vida los he visto, como mueren. Tom lo supo y trató de
ayudarme; quería que fuera feliz. Él descubrió la razón por la cual yo
los veo con las lágrimas colgando de mis ojos.
¿Y cuál es la razón?
Respiré hondo y suspiré en varias ocasiones hasta poder continuar.
Pertenezco a una maldición que ha sido heredada por
generaciones. Los Ante Portam; significa ante la puerta, la puerta que
da el contacto del más allá con este mundo. Está en nuestra sangre y
nadie puede evitarlo…
¡Aguarda! ¡Aguarda! Se está poniendo difícil de creer, pero se
supone ¿que estas maldita? técnicamente. Con tono tenue.
Necesito que me creas, Jimmy con llanto en mi tono y una
mirada de suplicio.
Claro que sí. Yo te creo atrapó mi rostro en sus manos . Debí
sospecharlo, cuando tu hermano te molestaba con tonterías de
fantasmas y cuando tu papá lo mencionó alguna vez cuando fuimos a
la convención; él dijo que no quería que esa convención te llenara la
cabeza con más ideas alucinatorias, lo recuerdo bien. Ellos no te
creen ¿Verdad?
No, solo me miran como si estuviera loca, pero es real con tono
desgarrado.
Yo te creo, Caro. Te lo juro sonriendo.
Gracias, pero eso no es todo
¿Qué podría ser peor? Dijo mientras aproximaba su distancia
con la mía.
Un alivio rotundo inundó mi cuerpo, sentí haber descargado un
enorme peso de mi espalda. Entonces mis palabras se volvieron más
francas y fluidas.
Tom conocía a Elizabeth; ella era una mujer exactamente igual a
mí en todas las formas, quizás también hasta en el pensamiento.
Éramos la misma persona, se supone reencarné de ella cuando murió
hace más de un siglo…
¡Espera! Si esa tal Elizabeth murió hace más de un siglo, entonces
¿Cómo era posible que Tom la conociera…? Silenció su pregunta.