Entre prójimos - Latin American Network Information Center
Entre prójimos - Latin American Network Information Center
Entre prójimos - Latin American Network Information Center
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
168 KIMBERLY THEIDON<br />
Huqychao, notas de campo, enero de 2003<br />
Esta mañana subí a la casa de nuestro compadre, Nicolás Huáscar, de 22 años. Estaba en<br />
la cocina desayunando con Zenaida. Su cocina era tan pequeñita y abrigada que todos<br />
entraban agachándose o casi de rodillas. Me llevaron al cuarto donde la bebita estaba<br />
durmiendo bien envuelta con frazadas. Nicolás había matado un carnero y nos trajo sopa<br />
de carne con arroz y fideos para calentamos. Estaba alimentando bien a Zenaida para que<br />
recuperase la fuerza que había perdido debido al parto. Conversamos mientras bebíamos a<br />
sorbos la sopa.<br />
Era chiquito en ese tiempo y no me recuerdo mucho. Una vez escuché cuando hacían<br />
formación -contó Nicolás-. Habían acordado a matar a nuestros enemigos. Decían:<br />
"¿Cómo vamos a permitir que esos que quieren que les apoyemos nos van a matar?".<br />
Un día habían venido a hacer reunión. Uno de esos estaba agarrando granada para que<br />
nos maten seguro. La gente ha reaccionado y les han agarrado a todos y les han<br />
matado. Nosotros hemos sufrido mucho hasta ahora. Cuando me recuerdo, me duele la<br />
cabeza. Nunca podíamos quejarnos. ¿A quién ya íbamos a quejarnos si de ambos nos<br />
mataban? Los terrucos mataban a la gente, decían que éramos yana umas [cabezas<br />
negras, acusación que implicaba el estar comprometido con las fuerzas armadas]. Así<br />
mataban a la gente. Igual venían los sinchis, decían que éramos terrucos y nos<br />
mataban no sé por qué sería. Yo era chiquito, no me recuerdo.<br />
Es cierto que hubo dos ideologías letales que influyeron en el escenario. La justicia<br />
comunal, que enfatizó la conciliación entre los partidos de un conflicto, cedió a las<br />
ideologías que eliminaron la "zona gris" de la jurisprudencia comunal (Peña Jumpa 1998;<br />
Theidon 2003a). Más bien, tanto la ideología senderista cuanto la de las fuerzas armadas<br />
enfatizaron el arrasamiento del enemigo, reemplazando la "zona gris" por una lectura en<br />
blanco y negro. Especialmente en las comunidades centrosureñas, citan el<br />
adoctrinamiento senderista como un factor de la brutalidad que practicaron entre ellos. La<br />
doctrina senderista introdujo no solamente nuevas justificaciones para matar, sino<br />
también nuevas formas de matar de maneras deliberadamente "espectaculares".<br />
Además, aunque las alianzas podían ser borrosas, para los militares no había un<br />
espacio para la neutralidad. Esta manera de pensar nos fue