Entre prójimos - Latin American Network Information Center
Entre prójimos - Latin American Network Information Center
Entre prójimos - Latin American Network Information Center
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
6 / LOS MALES DEL CAMPO: EPISTEMOLOGÍAS CORPORALES 69<br />
contraste entre su cara tersa y las caras arrugadas de las ancianitas reunidas en la iglesia,<br />
algunas ya con las caras húmedas por las lágrimas. No había forma de adivinar sus<br />
edades: la desnutrición, el sol abrasador y el dolor habían grabado su presencia alrededor<br />
de sus ojos, en sus mejillas, en las manos que levantaban para secar sus lágrimas.<br />
Orlando comenzó a hablar. Les hizo recordar que durante la violencia todos habían<br />
endurecido sus corazones. Ahora, en el contexto de la reconciliación, les habló de la<br />
necesidad de tener corazones blandos nuevamente, corazones capaces de sentir, de amar,<br />
de recordar.<br />
Este homenaje que damos a nuestros héroes hacemos sólo pensando que nuestro<br />
pueblo va ser diferente. Nacemos con el corazón blanco y con el corazón blanco hay<br />
que morir por el bien del pueblo. Nadie tiene que manchar nuestro corazón. Si nuestro<br />
corazón manchamos, así vamos a llegar a una vida de lágrimas [waqcry vicúz].<br />
Morimos con nuestro corazón blanco. Hay que perdonar, disculpar, no nos hagamos<br />
llorar para que nunca suceda lo que pasó. Si nuestro corazón es piedra, cambiemos.<br />
Nosotros estamos cruzándonos de arriba y abajo con nuestro corazón de piedra,<br />
pensamiento que nos causa dolor. Cambiemos y hay que abrir nuestro corazón porque<br />
nuestro pueblo está esperándonos. Y caminemos arriba y abajo con un solo pensamiento,<br />
caminando hacemos algo y sin caminar no hacemos nada. Hay que cambiar<br />
nuestros corazones de piedra para que ustedes vivan bien y todos vivamos bien con<br />
nuestros familiares. Nosotros mujeres, bebés, hombres, hemos caminado con tristeza<br />
sin tener hambre, ni sueño. Ahora cambiemos. Desde hoy día con nuestro corazón<br />
blanco no más hay que hablarnos. Hay que hablarnos con nuestro corazón blanco.<br />
Nuestro corazón cambiemos desde hoy día para [que] nunca haya esta llaki vida,<br />
waqay vida. Nuestro corazón, nuestro pensamiento nos hace doler. Nuestro corazón<br />
hay que ablandar para cambiar, para que no haya la vida de tristeza.<br />
El énfasis puesto en ablandar el corazón -y en el cambio- es muy llamativo. Hay que<br />
aprender a vivir con los recuerdos, muchos de ellos personificados en las caras de<br />
familiares o vecinos, sin que cada memoria desborde la capacidad del corazón de<br />
contenerla.<br />
Además, el concepto de "cambiar la vida" es un tema psicocultural central. Los<br />
campesinos buscan al curandero para cambiar su suerte; los feligreses en las iglesias<br />
evangélicas ruegan a Dios para que cambie sus vidas. Nuevamente, cuando cambia el<br />
contexto, cambia también la per