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creando su entorno único, participan en un juego de influencias recíprocas
con otros seres y con los fenómenos externos.
Los avances en la tecnología médica han puesto a nuestro alcance
aparatos capaces de explorar casi todos los aspectos de la anatomía
humana; dos ejemplos son la tomografía computada y la resonancia
magnética. Antes de que se desarrollaran estas técnicas, los huesos a
menudo oscurecían los rayos X. Pero hoy, cada parte del cuerpo puede
ser examinada en forma asombrosamente detallada. La resonancia
magnética produce lo que sería un examen en nivel atómico de la inseparabilidad
entre la vida y su ambiente: de los diversos átomos que
constituyen el cuerpo humano, algunos núcleos (como el del átomo de
hidrógeno) resuenan en un poderoso campo magnético, generando un
perfil energético característico. Las señales resultantes se procesan
con una computadora para producir una imagen del interior corporal.
A simple vista, hay una obvia distinción entre el interior del cuerpo
humano y el mundo externo, pero en el mundo submicroscópico del
átomo no existen demarcaciones “obvias”; ambos términos están formados
por los mismos elementos y átomos.
Otro ejemplo de la inseparabilidad entre la vida y su entorno se ve
en el nivel de salinidad de los fluidos corporales. Ese nivel es, aparentemente,
cercano al del agua marina. Algunos científicos evolucionistas
dicen que esto se debe a que las formas de vida de las cuales
descendemos evolucionaron en el océano. A fines del siglo XIX, el fisiólogo
británico Sydney Ringer trató de crear en su laboratorio soluciones
salinas que prolongaran la vida de tejidos animales sumergidos
en ellas. Produjo diversas combinaciones de sales orgánicas, pero sin
conseguir los resultados que esperaba. Al cabo de muchos intentos,
descubrió que el corazón de una rana había seguido latiendo en una de
sus soluciones. Resultó ser que uno de sus asistentes, por error, había
utilizado en la solución agua corriente, lo cual introdujo calcio y otras
sustancias inorgánicas. Gracias a ese error, estableció la composición