Escritos diversos - Banco de Reservas
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<strong>Escritos</strong> <strong>diversos</strong> Emiliano Tejera<br />
el realizado en 22 <strong>de</strong> enero <strong>de</strong> 1906, citando al expresado Señor, en su calidad <strong>de</strong> Presi<strong>de</strong>nte <strong>de</strong> dicha<br />
compañía, para comparecer ante el Tribunal, para oírse con<strong>de</strong>nar y oír <strong>de</strong>clarar la anulación <strong>de</strong> la<br />
concesión <strong>de</strong> dicha compañía.<br />
Todas estas protestas quedaron en suspenso, hasta que aprobada o <strong>de</strong>saprobada la convención<br />
pendiente con los Estados unidos, se procediese al examen y arreglo <strong>de</strong> estas y otras reclamaciones<br />
extranjeras. (Anexos nos. 6, 7, 8 y 9).<br />
como en el convenio celebrado en 11 <strong>de</strong> septiembre último entre la República Dominicana y<br />
los señores Kuhn loeb & co., banqueros <strong>de</strong> nueva york, para la contratación <strong>de</strong> un empréstito <strong>de</strong><br />
$20,000,000, oro americano, se <strong>de</strong>clara que parte <strong>de</strong> esa suma es para el pago <strong>de</strong> las reclamaciones<br />
hechas a la República; se han agitado en este año algunos Representantes Diplomáticos y consulares,<br />
con el fin <strong>de</strong> llegar a un acuerdo sobre dichas reclamaciones. las hay francesas, españolas, americanas<br />
y holan<strong>de</strong>sas, no contando las italianas que habían sido examinadas anteriormente. como entre<br />
esas reclamaciones hay varias por daños causados por tropas revolucionarias, y otras evi<strong>de</strong>ntemente<br />
exageradas, el Gobierno trabaja porque se acepte para el ajuste <strong>de</strong>finitivo <strong>de</strong> esas reclamaciones una<br />
cantidad que no exceda en ningún caso <strong>de</strong>l valor <strong>de</strong> las reclamaciones fundadas, y <strong>de</strong>jar a los respectivos<br />
Representantes que la distribuyan como lo encontraren más equitativo.<br />
VII<br />
En los anexos figuran varias memorias enviadas por nuestros cónsules en los lugares en que el<br />
comercio dominicano tiene más importancia. nótase en todas la expresión <strong>de</strong>l sentimiento que a sus<br />
autores causa la comprobación <strong>de</strong> la inferioridad <strong>de</strong> los productos dominicanos enviados en venta<br />
al extranjero, no porque estos en sí no sean <strong>de</strong> buena calidad natural, sino por el mal acondicionamiento<br />
que se les ha dado, y sin ninguna clasificación, y todos a una indican la necesidad <strong>de</strong> mejorar<br />
esos productos para lograr <strong>de</strong> ellos el mayor precio posible. Es realmente inconcebible que el interés<br />
individual no haya sido bastante po<strong>de</strong>roso para hacer que nuestros agricultores mejoren sus productos<br />
con el fin <strong>de</strong> obtener mayores beneficios <strong>de</strong> ellos, y que salvo el azúcar, algunas partidas <strong>de</strong> café, muy<br />
pocas <strong>de</strong> cacao y tabaco, el resto <strong>de</strong> la importación dominicana sea inferior en su preparación a las <strong>de</strong><br />
los productos <strong>de</strong> la misma clase <strong>de</strong> otros países. El cacao <strong>de</strong> Trinidad, por ejemplo, que es igual en su<br />
mayoría, al más inferior que tenemos aquí, obtiene en los mercados <strong>de</strong>l Havre, por su buena condición,<br />
trece pesos, cuando el nuestro <strong>de</strong> igual clase solo logra <strong>de</strong> ocho a nueve. muchas partidas <strong>de</strong> nuestro<br />
cacao, que por su calidad natural son iguales al <strong>de</strong> maracaibo, solo consiguen el precio <strong>de</strong> nueve a<br />
diez pesos, cuando el <strong>de</strong> maracaibo se paga a veinte y cuatro pesos por su excelente preparación. El<br />
país pier<strong>de</strong> un cuarenta o un cincuenta por ciento anual <strong>de</strong> lo que <strong>de</strong>bería obtener <strong>de</strong> su producción<br />
exportable, lo que equivale a la siembra <strong>de</strong> un número igual <strong>de</strong> tantas <strong>de</strong> las que producen la cosecha<br />
actual. Paréceme que es ya tiempo <strong>de</strong> que, por honra <strong>de</strong>l nombre dominicano, en beneficio <strong>de</strong>l país, y<br />
<strong>de</strong> los mismos que por <strong>de</strong>sidia o ignorancia <strong>de</strong>sprecian el legítimo beneficio que pudieran obtener, se<br />
dicte una ley, poco más o menos igual a la que está en <strong>de</strong>suso, que dificulte o prohíba la exportación<br />
<strong>de</strong> productos mal preparados y clasificados. A este resultado podría contribuir nuestro comercio, alentando<br />
con el aliciente <strong>de</strong> mejores precios a los que presentan productos bien preparados y clasificados,<br />
y no creyendo, como algunos <strong>de</strong> sus miembros lo han creído, que el agricultor <strong>de</strong>be acondicionar<br />
bien sus productos, no en beneficio propio, sino en beneficio <strong>de</strong>l comerciante, que sacaría <strong>de</strong> ellos<br />
precios más alzados. El buen acondicionamiento <strong>de</strong> los productos exige mayores gastos y atenciones,<br />
y es enteramente justo que la mayor parte <strong>de</strong>l beneficio que esto produce corresponda al que con su<br />
industria y cuidado les ha dado ese mayor valor. no ignoro que mientras no tengamos buenas vías <strong>de</strong><br />
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