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CHARLES NORDHOFF LA CIENCIA ADMINISTRATIVA AL ALCANCE OE LOS JOVENES 121
En la República Mexicana no se reconocen
títulos de nobleza ni honores hereditarios:
nadie puede ser juzgado por leyes privativas
ni por tribunales especiales. No hay más fuero
que el de guerra para los delitos y faltas que
tienen exacta conexion con la disciplina militar.
Ninguna ley tiene efecto retroactivo; nadie
puede ser juzgado ni sufri r una pena, sino por
ley anterior al caso y exactamente aplicada
por un tribunal previamente establecido.
Nuestra Constitucion prohibe laextradicion
de reos poi (ticos y la de delincuentes que
hayan tenido en el país que los reclama la
condicion de esclavos, así como celebrar convenios
en los que se alteren las garantías y
derechos del hombre y del ciudadano.
No puedes ser molestado en tu persona,
familia, domicilio, papeles y posesiones, sino
por órden escrita de autoridad competente
que funde en ley el motivo del procedimiento.
Se llama autoridad competente aquella á
quien la ley encomienda expresamente el procedimiento,
ya sea poi ítico, judicial, ó administrativo,
como á un juez juzgar y sentenciar,
á un prefecto cuidar de la tranquilidad, del
órden ó de la policía, á un empleado fiscal,
hacer efectivo el cobro de las contribuciones.
En el capítulo titulado ventajas é inconvenientes
del gobierno libre vimos la necesidad
que los ciudadanos tienen de auxiliar a los
funcionarios públicos para el mantenimiento
de la paz y la recta administracion de justicia.
Este es uno de los más importantes deberes
del hombre y lo distingue de los animales,
apartando de su corazon el egoismo.
Por esto la Constitucion, al mismo tiempo
que garantiza que nadie puede ser molestado,
sino en virtud de mandamiento de la autoridad,
dispone que en caso de delito infraganti,
toda persona puede aprehender al delincuente
y á sus cómplices, poniéndolos sin demora á
disposicion de la autoridad más inmediata.
Nadie puede ser preso por deudas de un
carácter civil, ni ejercer violencia para reclamar
su derecho. Sólo habrá lugar á prision por
delito que merezca pena corporal, debiendo
los tribunales estar siempre expeditos para
administrar justicia, que en todo caso será gratuita.
La simple detencion no excederá de tres
días y la prision sólo se decretará por auto
motivado.
Los procesados tendrán derecho de saber
el motivo del procedimiento y el nombre del
acusador, si la causa no se sigue de oficio, á
rendir su declaracion dentro de cuarenta y
ocho horas contadas desde que estén á disposicion
de su juez; á carearse con los testigos
qlole depongan en su contra; á producir su defensa,
haciéndolo personalmente ó por medio
de defensores, á cuyo efecto se les facilitarán
los datos que obren en el proceso, y flnalrnente,
á no ser juzgados dos veces por el mismo
delito ni en más de tres instancias.
La imposicion de penas en exclusiva deja
autoridad judicial, quien en ningun caso podrá
aplicar las de mutilaciones é infamia, marca,
azotes, palos, tormentos de cualquiera especie,
multa excesiva, confiscacion de bienes ni otra
inusitada ó trascendental. La de muerte sólo
se puede imponer al traidor á la patria en guerra
extranjera, al salteador de caminos, al incendiario,
al parricida, al homicida con aleves
ía, premeditación ó ventaja y á los reos de