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CHARLES NOROHOFF LA CIENCIA ADMINISTRATIVA AL ALCANCE OE LOS JOVENES 89
cial para los negocios federales y el poder judicial
comun para los de mas casos. Por regla
general puede decirse que las controversias
entre particulares corresponden exclusivamente
al poder judicial comun, así como el conocimiento
de los delitos en que no está interesada
la nacion.
Los tribunales de la Federacion conocen:
1. De todas las controversias que se susciten
sobre el cumplimiento de las leyes generales,
excepto en el caso de que su aplicacion sólo
afecte intereses de particulares. Pongamos por
ejemplo. Si se trata de la ley del Timbre, su
aplicacion afecta al interes del gobierno y es
materia de competencia de los tribunales federales;
pero si se trata del Código de Comercio
ó de Minería, aunque estas leyes son generales,
su aplicacion se ejerce sólo entre particulares
y conocen de ella los jueces locales del órden
comun.
11. De las controversias que versen sobre
derecho marítimo, porque todos esos asuntos
son concernientes á la nacion en general.
111. De las controversias en que la Federacion
fuera parte, de las que se susciten entre
dos ó más Estados y de las que puedan ofrecerse
entre un Estado y uno ó más vecinos de
otro. En estas cuestiones, la nacion ó los Estados
son parte jurídica en un asunto civil;
vervigracia, el cumplimiento de un contrato,
el deslinde del territorio de un Estado. En el
primer caso es notoria la competencia de los
tribunales federales: en los otros dos no deben
decidirse las cuestiones conforme á las leyes
de los Estados, porque faltaria el requisito
esencial de la imparcialidad y porque además
en cualquiera cuestion de un Estado se interesa
el equilibrio de la Federacion.
IV. De las controversias del órden civil ó
criminal que se susciten á consecuencia de los
tratados celebrados con las potencias extranjeras,
y conocerán por último de los casos
concernientes á los agentes diplomáticos y
cónsules. En estas materias se afecta el interes
general de la nacion, y por eso son extrañas á
la competencia judicial de los Estados.
Pero el más notable asunto de que conocen
los tribunales federales es el juicio de amparo.
En él se hacen efectivas las garantías que otorga
al hombre nuestra Constitucion para que
goce plenamente de sus derechos naturales.
Es tambien una garantía en favor del sistema
federativo, pues que anula las invasiones de la
Federacion en los Estados y las de estos en
las facultades propias de aquella.
El juicio de amparo es una invencion de los
hombres de Estado de México. El fija entre
nosotros el derecho público y pone en manos
de la Suprema Corte de Justicia el equilibrio
poi ítico de la nacion y los derechos individuales
del hombre.
XVI
DE LOS AYUNTAMIENTOS
Una ciudad ó pueblo es la más pequeña subdivisión
poi ítica que conocemos.
Cuando el pueblo de una ciudad, ó mejor
dicho, cuando los habitantes de la demarcacion
de una ciudad, tienen que ocuparse de los
asuntos propios de la localidad, encomiendan
estas funciones á unos cuantos individuos de
entre ellos para que hagan todo lo que concierne
á los intereses meramente locales. Esta